Transcript DISCERNIMIENTO TENTACIONES Y TOMA DE DECISIONES La atracción • En el discernimiento, uno de los temas más difíciles de manejar es el de.

DISCERNIMIENTO
TENTACIONES Y TOMA DE DECISIONES
La atracción
• En el discernimiento, uno de los temas más difíciles de manejar
es el de las “tentaciones”
• Nuestra naturaleza es “atraída” hacia diversos “objetos”
• Que satisfacen nuestros deseos, aspiraciones, sueños, intereses, gustos y
sentidos (ver, oír, tocar, gustar, …)
• Y que nos causan placer y satisfacción
• Nuestra naturaleza es atraída porque estos objetos parecerían responder
a nuestra necesidad profunda de ser felices
• Y esta atracción es natural (está en la misma naturaleza humana)
• Somos atraídos hacia lo bello, bueno y verdadero
• Pues hemos sido hechos para Dios, que es bondad, verdad, belleza y
felicidad absolutas
• En principio, toda atracción hacia la verdad, bondad y belleza
es buena y natural
• Desgraciadamente, en esta guerra cósmica entre el bien y el mal, una
de las armas que usa la fuerza negativa para desviarnos de Dios …
• Es usar nuestra natural inclinación hacia la verdad, bondad y belleza …
• Para proponernos APARENTES verdades, bondades y bellezas que llevan a
separarnos de Dios o que NO SON convenientes
• Son inconvenientes porque NO AYUDAN a los demás ni ayudan a la
comunidad ni ayudan a construir (unir, hacer crecer, facilitar, …) ni nos
ayudan a volver a Dios
• Como dice Pablo: “Todo es lícito, mas no todo es conveniente. Todo es
lícito, mas no todo edifica” 1Co 10,23
• Con frecuencia somos atraídos hacia aparentes verdades, bondades y
bellezas que son inconvenientes y que nos separan de Dios
• Por tanto es necesario discernirlas …
La apariencia
• Hay pues objetos y situaciones que “parecen” buenos … pero que
NO lo son
• Que parece que llevan a Dios, pero que en realidad separan y alejan
• Que parece que dan felicidad …
• Pero que en realidad, a uno lo dejan vacío, solo, triste … y menos feliz que antes
• Que parece que llevan a la vida, pero que en realidad la quitan
• Es decir, hay objetos y situaciones que nos ofrecen una
APARENTE y falsa felicidad
• “No todo lo que brilla es oro”
• La belleza natural es verdadera; pero el ME nos ofrece una belleza “trucada”
• Y nos dejamos engañar al elegirla
El criterio …
• Para que una atracción sea verdaderamente “buena”, debe
llevarnos o acercarnos a Dios
• Debe llevarnos a lo bueno (a que el fruto o resultado sea bueno)
• Debe llevarnos a hacer su voluntad
• Si una atracción nos separa de Dios, nos impide acercarnos o
nos aleja de él y de los demás (llevándonos a hacer/decir algo
que no es su voluntad)
• Rompe la unidad, crea malestar, afecta negativamente a otros, …
• Entonces esa atracción NO puede ser de Dios
• Se trata de una “falsa atracción”, que busca distraernos de Dios
• Pues nos lleva a hacer lo que no es agradable a sus ojos
La tentación
• Tentación es una “atracción” hacia algo (hacer/decir)
• Que finalmente termina en alguna cosa mala (que va contra la voluntad de
Dios), o distractiva (nos desorienta de las cosas de Dios)
• La tentación en sí misma no es mala
• Responde a la “atracción” natural que siente toda persona
• Y nos ofrece la posibilidad de ejercer nuestra libertad
• Pero hay algo en ella que no es de Dios (o que no gusta a Dios)
• Ya sea el principio, el medio o el fin
• Todos tenemos tentaciones
• También las tuvo Jesús
• Y todos podemos también rechazarlas y no hacerles caso …
• Como lo hizo Jesús
• El problema no es tener tentaciones
• El problemas es hacerles caso (seguirlas, caer en ellas)
• Por eso Jesús nos invita a pedir:
• “No nos dejes caer en tentación …” Mt 6,13
• Una vez que concretamos la tentación (la realizamos y caemos
en ella) …
• Entonces nos separamos de Dios (a esto se le llama “pecado”)
• Se hacemos esto, … nos ha ganado el ME
• La tentación es una atracción con “apariencia de bien”
• Que NO lleva a buen fin
• Es creación del Mal Espíritu
• La propone el “mentiroso por excelencia”
• Diábolos = mentiroso, calumniador
• Es el mortal enemigo (satán) de la naturaleza humana
• Y lo que hace es procurar engañarnos, haciéndonos ver verdad
en donde no la hay y descubrir bondad en donde no existe
• Y cómo es “muy hábil en su mentira (muy sutil)”
• Nos presenta lo falso de tal manera que nos hace creer que es verdadero
• A fin de que lo elijamos y nos salgamos del camino hacia Dios
Hay que descubrir al ME …
• El discernimiento nos ayuda a “reconocer” la intervención del Mal
Espíritu (en aquello que nos atrae), y tomar conciencia del mal fin al
que lleva
• Ayuda a descubrir la “apariencia” de bondad que hay detrás de algo que
nos atrae, y desenmascarar al Enemigo
• Ayuda a darnos cuenta de la “falsedad” que hay detrás de lo atractivo
• El objetivo = poder rechazar la tentación (no seguirla) y así
mantenernos en el camino
• Para ello es necesario que reconozcamos al Mal Espíritu
•
•
•
•
•
Saber cómo se presenta
En qué momentos actúa
Que estrategias usa
Y cómo procura engañarnos
… para que al elegir NO nos equivoquemos
¿Cuándo nos tienta?
• El ME interviene sólo cuando estamos en desolación (nunca lo
puede hacer cuando estamos consolado por Dios)
• Es en momentos de desolación (oscuridad, noche) en donde el ME
campea
• Nos tiene a su merced
• Recordemos que una “falsa consolación” es, en realidad, una desolación
• El ME nos hace creer que estamos siendo movidos por Dios
• Por eso es sumamente necesario saber cómo actuar en desolación
• Cf. las “primeras reglas de discernimiento”
• Interviene especialmente cuando estamos:
• en una dificultad
• una necesidad, una preocupación
• una urgencia
• un dolor
• un fracaso
• un sufrimiento
• un vacío, una soledad
• un rechazo, una incomprensión, …
• Es decir, … cuando estamos débiles, necesitados y como separados de
nuestro Creador y Señor
• La tentación apela a nuestro deseo de salir del malestar en el
que nos encontramos
¿Cómo lo hace?
• Generando y manteniendo en nosotros pensamientos, ideas,
proyectos, propuestas, ... que parecen buenos pero … que no son de
Dios
• Incitándonos a sostener posturas, opiniones y críticas que dividen,
obstaculizan la comunión y crean un clima de malestar
• Proponiéndonos pensamientos que no nos llevan a ninguna parte o
ilusiones que no ayuda hacerlas realidad, porque haremos daño
• “Todo el que mira a una mujer (hombre) deseándola, ya cometió adulterio
con ella en su corazón” Mt 5,28
• Creándonos sentimientos de temor, desconfianza y rencor
• Empujándonos a descalificar al prójimo para desacreditarlo y destruir
todo esfuerzo de bien
• Llevándonos a racionalizar y a justificarnos en lo que estamos
haciendo, y a no querer cuestionarnos …
• Y lo hace a través:
• De personas: parientes, amigos, conocidos, …
• De circunstancias: libros/revistas, películas, internet, conversaciones, etc.
• Aprovechando:
• Las limitaciones de nuestro carácter/personalidad
• Ya sean nuestras fortalezas … para que pasemos por encima del otro
• O nuestras debilidades o puntos frágiles … para paralizarnos
• Nos ataca como león rugiente buscando a quién devorar …
• “Sean sobrios y velen. Su adversario, el Diablo, ronda como león rugiente,
buscando a quién devorar. Resístanle firmes en la fe, sabiendo que sus
hermanos que están en el mundo soportan los mismos sufrimientos” 1Pe 5,8-9
Estrategias y Defensas
Tres son las estrategias que usará el ME para tentarnos y ganar
• 1) Se hará como mujer (que es más débil que el hombre) – Regla 12
• Se crece ante la debilidad (aprovechando nuestra debilidad y falta de firmeza,
de tesón, de lucha, …), y se achica ante el enfrentamiento
• Nos defendemos haciéndole frente, oponiéndonos, atacando …
• 2) Se hará como vano enamorado – Regla 13
• Se desarrolla en el secretismo y la oscuridad (aprovechando nuestra vergüenza,
timidez, buen nombre, ...), y desaparece ante la claridad y la transparencia
• Nos defendemos hablando, confesándonos, siendo transparentes, …
• 3) Se hará como ladrón – Regla 14
• Nos ataca por donde estamos flojos, débiles, carentes (por donde cojeamos), y
se retira ante nuestra seguridad y fortaleza
• Nos defendemos fortaleciendo nuestros puntos débiles
• 1) Se hace como mujer – (EE325 - R12)
• “El enemigo se hace como mujer, al ser débil y a la vez tenaz; porque así
como es propio de la mujer, cuando discute con algún hombre, perder ánimo
y abandonar cuando el hombre le hace frente; y al contrario, si el hombre
comienza a huir perdiendo ánimo, la ira, venganza y ferocidad de la mujer es
muy grande y sin medida”
• “De la misma manera es propio del Enemigo debilitarse y perder ánimo,
abandonando sus tentaciones, cuando la persona que se ejercita en las
cosas espirituales se enfrenta a las tentaciones del Enemigo, haciendo
exactamente lo opuesto
• Y por el contrario, si la persona que se ejercita comienza a tener temor y
perder ánimo al sentir las tentaciones, no hay bestia tan fiera sobre la faz de
la tierra como el Enemigo de la naturaleza humana, en conseguir su dañada
intención con tan crecida malicia”
• 2) Se hace como vano enamorado – (EE326 - R13)
• “Asimismo, el Enemigo se hace como un falso enamorado al querer ser
secreto y no descubierto; porque así como el hombre inescrupuloso, por
aprovecharse, pretende a la hija de un buen padre o a la mujer de un buen
marido, y quiere que sus palabras y engaños se mantengan en secreto; le
molesta mucho, cuando la hija al padre, o la mujer al marido, le cuenta sus
vanas palabras y su intención depravada, porque fácilmente se da cuenta que
no podrá salirse con la suya”
• “De la misma manera, cuando el enemigo de la naturaleza humana trae sus
astucias y persuasiones al alma recta, quiere y desea que éstas sean
recibidas y guardadas en secreto
• Pero cuando las descubre a su buen confesor o a otra persona espiritual que
conozca sus engaños y malicias, le molesta mucho; porque se da cuenta que
no podrá salirse con la suya, pues serán descubiertos sus evidentes engaños”
• 3) Se hace como ladrón – (EE327 - R14)
• “Asimismo, el Enemigo se hace como un abigeo, para vencer y robar lo que
desea; porque así como un abigeo o delincuente del campo, tomando posición y
mirando las fuerzas o las seguridades de una propiedad, la ataca por la parte
más débil”
• “De la misma manera el enemigo de nuestra naturaleza humana, rondando, mira
en torno nuestro todas nuestras virtudes teologales, cardinales y morales
• Y por donde nos encuentre más débiles y más necesitados para nuestra
salvación eterna, por allí nos ataca y procura tomarnos”
Modos de tomar una decisión
• Finalmente, Ignacio propone 3 modos de elegir en forma
ordenada (discernida) (EE175-178)
• Primer modo: Cuando la persona ve con extrema claridad (sin dudar ni
poder dudar; cuando es evidente) lo que Dios desea para ella
• Es decir cuando la persona tiene una “consolación sin causa” (sólo de Dios),
en donde la voluntad de Dios le es evidente (sin la menor duda)
• Segundo modo: Cuando la persona elige el mejor medio, luego de un
proceso cuidadoso de “discernimiento de espíritus”
• En donde, luego de examinarse por un tiempo, elije lo que le señalan sus
consolaciones, y el BE que las mueve
• Tercer modo: Cuando la persona no puede elegir examinando sus
movimientos interiores, porque está viviendo un “tiempo tranquilo” y sus
movimientos interiores no son fácilmente sensibles
• En este caso, la persona siempre ha de tener presente el único fin (= volver
a Dios; ayudar al prójimo)
• Pero va a hacer su elección siguiendo más bien sus “potencia naturales”
(su razón), en lugar de distinguir espíritus (cuyas mociones son poco
sensibles)
• Usa su razón y su sentido común, va a sopesar y ponderar los diversos
medios …
• A fin de elegir el que más y mejor lo lleve a Dios
Elegir siguiendo la razón
• Lo mejor es elegir según cualquiera de los dos primeros modos
(especialmente el segundo)
• Es decir, siguiendo las indicaciones de las consolaciones y del Buen Espíritu
• Examinándose, según se ha indicado en las reglas
• Si esto no es posible según los dos primeros modos, entonces hay que
tomar una decisión siguiendo este ‘tercer modo’
• Ignacio nos sugiere dos maneras (o métodos) de seguir este ‘tercer modo’:
• A) Hacer las listas de las razones a favor y en contra
• B) Ponerse en “situaciones límite”
A) El método de las razones a favor y en
contra
• 1. Tener frente a los ojos el medio mutable sobre el cual deseo
elegir:
• Por ejemplo: Una carrera, un trabajo, …
• 2. Tener presente el fin que me mueve:
• El único fin debe ser Dios y su servicio (volver a él)
• 3. Sentirme totalmente “indiferente” (libre) ante el medio
• No inclinado ni a favor ni en contra de las alternativas que estoy considerando
• Sólo deseando elegir lo que sea más gloria y alabanza de Dios
• 4. Pedir ayuda a Dios:
• Para que me muestre lo que debo elegir (y que sea su mayor gloria), y me haga
reflexionar y elegir lo que él desea
• 5. Hacer la lista de razones a favor y en contra (y sólo para
alabanza y gloria de Dios y salvación mía)
•
•
•
•
Primero, todas las razones a favor (provechos) de elegir el medio
Segundo, todas las razones en contra (peligros) de elegir el medio
Tercero, todas las razones a favor (provechos) de rechazar el medio
Cuarto, todas las razones en contra (peligros) de rechazar el medio
• 6. Una vez hechas las listas de los argumentos a favor y en
contra
• Mirar hacia dónde se inclina “la razón”
• Y siguiendo sólo la razón, y de ningunas manera los afectos (deseos
mundanos), elegir lo más conveniente
• Hecha la elección, ir a la oración
• Y ofrecerle a Dios lo elegido
• Para que Dios la quiera recibir y confirmar, para su mayor servicio
B) El método de las ‘situaciones límite’
• 1. Ponerse en oración de manera que, al entrar en la elección,
uno sea solamente guiado (movido) por el amor de Dios que
desciende de arriba
• De forma que el medio que uno vaya a elegir, lo elija sola y
exclusivamente por el amor que se le tiene a Dios
• 2. Imaginar a un hombre que nunca he visto ni conocido:
• Y deseándole el mayor bien (su perfección), considerar qué le
aconsejaría que hiciese (eligiese), para mayor gloria de Dios y para que
pueda volver a él
• Y elegir para mí de la misma manera
• 3. Considerar que estoy a punto de morir
• Si me encuentro en esta situación y tengo que elegir, ¿qué es lo que elegiría?
• En consecuencia, elegir ahora según lo que hubiera elegido
• 4. Imaginar que me encuentro en el día del juicio final
• ¿Qué me hubiera gustado haber elegido?
• Por tanto, hacer ahora de la misma manera
• 5. Finalmente, hecha la elección siguiendo este método …
• Ir a la oración y ofrecerle a Dios lo elegido
• Para que Dios la quiera recibir y confirmar, para su mayor servicio
a.m.d.g.
Compañía de Jesús - Provincia del Perú
CEI – Centro de Espiritualidad Ignaciana
Av. Fulgencio Valdez 780, Breña – Lima 5
[email protected]
T: 433-7337