Las viviendas y la higiene

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 Según los datos arqueológicos las
casas medievales eran muy
simples, por regla general. Su
tamaño era reducido y estaban
construidas en madera, adobe y
piedras, utilizando paja para el
techo.
•Las cabañas de los
campesinos solían medir
entre 2 y 6 metros de largo
por dos de ancho, horadando
el piso para crear un
ambiente más cálido. En su
interior habitaban la familia
y los animales, sirviendo
estos de "calefacción".
•Las casas podían tener una cerca
alrededor donde se ubicaría el huerto,
uno de los espacios más queridos en
la época.
•El mobiliario de las casas era
muy escaso. Algunas ollas de
cerámica, platos y marmitas, una
mesa y taburetes para comer.
Las casas de los sirvientes y
campesinos se ubicaban en las
cercanías del castillo.
Generalmente eran viviendas
pequeñas, sucias y míseras en lugar
de hogares.
Sin embargo, las viviendas de los
nobles eran totalmente diferentes.
•La casa medieval por excelencia era el castillo. A
modo de defensa poseía anchos muros de piedra
con pequeñas ventanas protegidas por rejas.
•Gran parte del espacio estaba dedicado a las
armas ya que el tema de la lucha siempre estaba
presente.
•Los muebles fundamentales eran los arcones
(que se usaban como cofres o mesas) , los
taburetes y las camas.
A continuación vamos a ver las partes en
las que se compone un castillo:
Barbacana: Es una obra de fortificación
situada frente a las murallas y protegiendo
una puerta de acceso. Podían contar con
portales propios fortificados de paso
obligatorio para acceder a la puerta principal.
Torre del homenaje. Es la
torre principal del castillo,
residencia de los
responsables del mismo,
normalmente la más alta y
fuerte, y estaba situada en
el lugar de más fácil
defensa. Era el lugar más
protegido y en caso
necesario podía convertirse
en el último núcleo de
resistencia.
Foso: trinchera excavada frente a los muros de
una fortificación. Su misión principal era
impedir que las máquinas de asalto se
aproximaran a los muros.
El rastrillo o peine
suele ser una pesada
reja, rematada abajo
en puntas que
formaba parte de las
fortificaciones de la
puerta, junto al
puente levadizo y la
barbacana.
Almenas, tenían como función
proteger a los defensores, algunas
tenían orificios, como troneras (para
las armas de fuego) o saeteras (para
lanzar armas arrojadizas).
Adarve o camino de ronda, donde se parapetaban
los defensores.
LA HIGIENE
¿Cómo era la higiene de las personas en la Edad
Media? ¿A qué olían las ciudades, las casas y las
personas de esa época?
Generalmente, se dice que en la Edad Media las
personas no tomaban baños, y vivían en un estado de
completa suciedad, sin embargo, parece que esto es un
mito. Historiadores señalan que al menos en las
ciudades existió una actitud positiva hacia el baño.
Los baños públicos florecieron en las grandes
ciudades europeas en el siglo XIII, y para el siglo XV
ya eran algo normal en pueblos medianos.
Los baños medievales usaban tinajas de madera con
agua caliente en las que cabían dos o tres personas.
El baño era también una parte importante en los
rituales de los caballeros medievales. Para su
nombramiento, debía bañarse antes
de pasar la noche en oración para estar corporal y
espiritualmente purificado para convertirse en
caballero.
La actitud de la iglesia hacia el baño no era positiva, lo
condenaba ya que lo veía como un lujo innecesario y
pecaminoso.
Es probable que de documentos religiosos que
condenaban al baño es de donde proviene la actual
concepción de que la gente de la edad media no se
bañaba.
•La orina humana en la edad media tuvo muchos
usos. Esta era recogida en vasijas (dispuestas en las
calles y en los rellanos de las escaleras) y se utilizaba
en las lavanderías (por su alto contenido en
amoniaco). La blancura de las lanas y los linos de
senadores, emperadores, reyes, nobles y caballeros
procedía de los orines de los pobres, los siervos y los
campesinos.
•Por muy desagradable que parezca, en la edad
media la orina también era empleada para la higiene
bucal.
•Las mujeres expulsaban sus excrementos sin sacarse
el vestido detrás de las cortinas, y luego los sirvientes
pasaban a recogerlo.
•Para evitar el olor que desprendían los cuerpos humanos, las
damas comenzaron a utilizar abanicos con mucha
frecuencia, y quienes tenían suficiente poder eran
abanicados.
•Los baños se realizaba en una bañera de agua caliente,
primero se bañaba el padre, luego el resto de hombres por orden
de edad y luego las mujeres. Los niños y bebés eran los
últimos.
•En la Edad Media la mayoría de las bodas se celebraba en el
mes de junio, al comienzo del verano. La razón era sencilla: el
primer baño del año era tomado en mayo, así, en junio, el olor
de las personas aun era tolerable. Asimismo, como algunos
olores ya empezaban a ser molestos, las novias llevaban
ramos de flores, al lado de su cuerpo en los carruajes para
disfrazar el mal olor.
•Los lugares para enterrar a los muertos eran pequeños
y no había siempre suficiente sitio para todos. Los
ataúdes eran abiertos y retirados los huesos para meter
otro cadáver. Los huesos eran retirados a un osario. A
veces al abrir los ataúdes, se percibía que el enterrado
había arañado la tierra, había sido enterrado vivo.
En esta época surgió la idea de, al cerrar el ataúd,
agarrar a la muñeca del difunto un hilo pasarlo por un
agujero del ataúd y atarlo a una campanilla sobre la
tierra. Si el individuo estaba vivo solo tenia que tirar del
hilo y sonaría la campanilla y seria desenterrado ya
que una persona estaba al lado del ataúd durante unos
días. De esta acción surge la expresión Salvados por la
campana que usamos hoy día. Interesante, ¿no?
Es sorprendente a cuanta gente le gustaría haber
vivido en la Edad Media, si preguntas ¿en qué época te
hubiese gustado vivir? la mayoría responderán esto,
con tanto caballero andante, las damas con esos
vestidos, y tanto honor...
Seguramente, después de leer esto, algunos ya no
pensarán lo mismo, ¿no crees?
FIN
María del Mar Boza