ANTOLOGÍA DE POESÍA INFANTIL Este libro de antología, consta de 17 poemas a elección, dedicado principalmente a niños y aquellos que tienen.

Download Report

Transcript ANTOLOGÍA DE POESÍA INFANTIL Este libro de antología, consta de 17 poemas a elección, dedicado principalmente a niños y aquellos que tienen.

ANTOLOGÍA DE POESÍA INFANTIL
Este libro de antología, consta de 17 poemas a elección,
dedicado principalmente a niños y aquellos que tienen alma
de niño.
“La mejor poesía abunda en desencuentros; nace en medio de
contradicciones y, en no pocas ocasiones, las hace más
hondas, produciendo estupor y consuelo a la vez: venir a este
mundo valía la pena, después de todo, ¡si puede embellecerse
tanto!”. [Enrique Serrano]
La Tierra
Gabriela Mistral
Chilena
Danzamos en tierra chilena,
y besa los pies de la ronda
más suave que rosas y miel,
que la hace, cual madre, gemir.
la tierra que amasa a los hombres
de labios y pechos sin hiel.
Es bella, y por bella queremos
su césped de rondas albear;
La tierra más verde de huertos,
es libre, y por libre queremos
la tierra más rubia de mies,
su rostro de cantos bañar…
la tierra más roja de viñas,
¡qué dulce que roza los pies!
Mañana abriremos sus rocas,
la haremos viñedo y pomar;
Su polvo hizo nuestras mejillas, mañana alzaremos sus pueblos:
su río hizo nuestro reír,
¡hoy solo sabemos danzar!
Canción
El lagarto está llorando.
La lagarta está llorando.
El lagarto y la lagarta
con delantalitos blancos.
Federico García Lorca
Español
El sol, capitán redondo,
lleva un chaleco de raso.
Han perdido sin querer
su anillo de desposados.
¡Ay!, su anillito de plomo;
¡ay!, su anillito plomado.
¡Miradlos, qué viejos son!
¡Qué viejos son los lagartos!
Un cielo grande y sin gente
monta en su globo a los pájaros.
¡Ay!, cómo lloran y lloran;
¡ay, ay!, cómo están llorando.
Pero el sueño no…
Germán Berdiales
Argentino
Para esta niñita
Para esta niñita
su madre compró su madre guardó
una linda cuna
el rico tesoro
y un blando jergón. de su inmenso
amor.
Pero el sueño no.
Pero el sueño no.
Para esta niñita
su madre encargó Para esta niñita
un ajuar bordado
su madre buscó
con mucho primor. cuanto hay en el
Pero el sueño no.
mundo y todo le
dio.
Para esta niñita
su madre pidió
Pero el sueño no,
al mejor platero
que se le olvidó.
su alhaja mejor.
Pero el sueño no.
Tanto he vagado en el bosque
cantando versos y rimas,
que ya no temen mi paso
las alegres golondrinas.
Y tanto me aman los pobres,
que, por oír mis estrofas,
unas se posan en mi hombro
y andan muy quedo las otras.
Hoy no más me vio una amiga
escribiendo un sonetillo,
se acercó… ¡y en el piquito se lo
llevó para el nido!
Mis amigas
Carlos Pezoa Véliz
Chileno
En el país de no me acuerdo
En el país de no me acuerdo
doy tres pasitos y me pierdo.
Un pasito para allí,
no recuerdo si lo di.
Un pasito para allá,
ay que miedo me da.
Un pasito para atrás
y no doy ninguno más
porque ya, ya me olvidé
donde puse el otro pie.
María Elena Walsh
Argentina
El niño quiere perderse
entre los árboles;
el niño tiene un caballo
de pura sangre.
El niño sube a países
de luz y aire;
con una espinita de oro
mata gigantes.
El niño muerde manzanas
así… de grandes…
y a orillas de un
mar de música
llama a su madre.
Sueño
Claudia Lars
Salvadoreña
Con paso leve, leve
llega el hada madrina
por el camino breve
de unos rayos de luna.
Llega envuelta en silencio;
Trae un ensueño en rosa
flor de luz o de estrella…
Con paso leve, leve,
de perfumada huella.
Trae envuelto en jirones
de nube, un sueño rosa,
(¿O es tal vez en vellones
de alguna oveja alada?)
trae un ensueño rosa
para la dulce ahijada,
con sabor a verbena,
impregnado en su tibia
belleza de hada buena.
Con paso leve, leve,
se va el hada madrina
por el camino breve
de unos rayos de luna.
Canción de Cuna
Rita Esther Cosani Sologuren
Chilena
Cristóbal
¿Y la luna?
Martín Concha Cosani León Felipe
Español
Chileno
Por regar pecho arrecido
saqué un nombre de mi noria:
Jesús de cierta memoria,
Cristo de ciertos olvidos.
la ramazón del otoño…
Vino como regalado
Como a la vara el retoño
que nadie se lo pensara,
fácil como el viento para
este Niño Inmerecido:
todo de amor y de olvido,
¿Quién se lo hubiera ganado?
Pues no se gana el regalo
ni se convence al cariño,
es Manuel y Fácil Niño
también para el niño malo.
¿Y la Luna?
En el pozo la guardaron.
Pero fue en vano, fue en vano,
toda la vela fue en vano.
Para que no la robasen
en el pozo la guardaron
Al llegar la madrugada
-como una onza en un bolsoel Sol levantó los brazos
aquellos fieros románticos.
y asomó sobre la sierra
Y estuvieron dos cipreses
su rostro congestionado
la noche entera velando.
de risa, que gritaba:
La noche entera de un siglo ¡La han robado, la han robado,
las dos cipreses velaron.
la han robado…!
León Felipe
Español
Ojitos de pena,
carita de luna,
lloraba la niña
sin causa ninguna.
La madre cantaba,
meciendo la cuna:
-No llore sin pena,
“carita de luna”.
Ojitos de pena,
carita de luna,
la niña lloraba
amor sin fortuna.
“¡Qué llanto de niña!
sin causa ninguna”
-pensaba la madre,
como ante la cuna-.
¡Qué sabe de pena,
“carita de luna”!
Ojitos de pena,
carita de luna,
ya es madre la niña
que amó sin fortuna;
y al niño consuela
meciendo la cuna:
-No llore, mi niña,
“sin causa ninguna”;
¿no ve que me apena,
“carita de luna”?
Ojitos de pena
Max Jara
Chileno
Ojitos de pena,
carita de luna,
abuela es la niña
que lloró en la cuna.
Muriéndose, llora
su muerte importuna.
-¿Por qué llora, abuela,
“sin causa ninguna”?
Llorando las propias,
¿quién vio las ajenas?
Mas todas son penas,
“carita de luna”.
El Sol quería bañarse
Porque tenía calor.
Llevaba el calor por dentro.
La luna se lo advirtió;
pero el Sol no le hizo caso,
ni siquiera le escuchó,
porque el calor que tenía
le quitaba la razón,
y hacia el caer de la tarde
se tiró al mar y se ahogó.
Al ver que se ahogaba el pobre,
el cielo se oscureció,
las estrellitas lloraban
lágrimas de compasión;
negro todo el mar se puso
de tristeza que le dio.
Sólo la luna en el cielo
muy serena se quedó.
“No os asustéis – les decía -.
que no hemos perdido el Sol.
Mañana de mañanita
saldrá por otro rincón,
más fresco que una lechuga
con el baño que se dio”.
A la mañana siguiente,
sonriente salió el Sol;
el cielo se puso alegre,
el mar, de gozo, bailó,
El Sol quería bañarse…
Salvador de Madariaga
Español
las estrellas se reían
del susto que el Sol les dio;
Y la luna, satisfecha,
en su cuarto se durmió
Cuando se calla la tarde
levanta su voz el río.
Alma y música es la marcha,
arena y piedra el camino.
Heladas, vientos y lluvias,
manantiales y rocíos.
Cuánto de cumbre y de cielo
esconde la voz del río…
El cielo sobre las cumbres.
La cumbre sobre el abismo.
La noche sobre las piedras.
Y el mundo en la voz del río.
Noche en el río
Atahualpa Yupanqui
Argentino
Jesús
Jesús
Callando va el canto,
Haciendo la ronda,
Gabriela Mistral
callando de asombro.
Gabriela
Mistral
se nos fue la
la ronda,
tarde.
Haciendo
Chilena
Se oprimen las manos,
Chilena
seEl
nossolfuehalacaído;
tarde.
se oprimen temblando.
la montaña
no
arde.
El sol ha caído;
Danzando, danzando,
Pero
la rondanoseguirá,
la montaña
arde.
la vivienteYfronda
giramos a su redor
aunque
en
el
cielo
el
sol
no
está.
Pero la ronda seguirá,
no loyoyó
sin venir
romper el resplandor.
Y giramos a su redor
aunque en el cielo el sol no está.
y entrar enYa
la ronda.
es silencio el coro,
y sin romper el resplandor.
Ha abierto el corro,
sin
rumor,
ya ninguno canta:
Danzando, danzando,
y al centro está hecho
resplandor.
se oye
el corazón
Ya es silencio el coro,
la viviente fronda
en vez de garganta.
ya ninguno canta:
no lo oyó venir
Callando va el canto,
y entrar en la ronda.
callando¡Ydemirando
asombro.su rostro arder,se oye el corazón
en vez de garganta.
Ha abierto el corro, sin rumor,
Se oprimen
las
manos,
nos va hallar el amanecer!
y al centro está hecho resplandor.
se oprimen temblando.
¡Y mirando su rostro arder,
nos va hallar el
amanecer!
La cabra
La cabra suelta en el huerto
andaba comiendo albahaca.
Toronjil comió después
y después tallos de malva.
Era blanca como un queso, Se puso a balar después
como la luna era blanca. bajo la clara mañana.
Cansada de comer hierbas, Su balido era en el aire
se puso a comer retamas. un agua que no mojaba.
Nadie la vio sino Dios. Se fue por el campo fresco,
Mi corazón la miraba. camino de la montaña.
Ella seguía comiendo Se perfumaba de malvas
flores y ramas de salvia. el viento cuando balaba…
Oscar Castro
Chileno
Duérmete, mi niño,
duérmete sonriendo,
que es la ronda de astros
quien te va meciendo.
Gozaste la luz
y fuiste feliz.
Todo el bien tuviste
al tenerme a mí.
Duérmete, mi niño,
duérmete sonriendo,
que es la tierra amante
quien te va meciendo.
Miraste la ardiente
rosa carmesí.
Estrechaste al mundo;
me estrechaste a mí.
Duérmete, mi niño,
duérmete sonriendo,
que es Dios en la sombra
quien te va meciendo.
Me tuviste
Gabriela Mistral
Chilena
Se equivocó la paloma
Se equivocó la paloma.
Se equivocaba.
Por ir al norte, fue al sur.
Creyó que el trigo era agua.
Se equivocaba.
Creyó que el mar era cielo;
que la noche, la mañana.
Se equivocaba.
Que las estrellas rocío;
que el calor, la nevada.
Se equivocaba.
Que tu falda era tu blusa;
que tu corazón, su casa.
Se equivocaba.
(Ella se durmió en la orilla.
Tú, en la cumbre de una rama).
Rafael Alberti
Español
y en un carrito de brisas
nevadas
Porque te tengo y no Entre las barbas
porque
tú existes dondequiera
tirado por dos luceros
,
los sueños.
porque te pienso se enredan niños
Corazón
coraza
pero existes
mejor donde te quiero
San Nicolás riela el éter,
Mensaje de ingenuidades
porque la noche está de ojos abiertos
porque tu boca es sangre
ligero como el incienso!
escrito en hojas de trébol.
porque la noche pasa y digo amor
Mario Benedetti
y tienes frío
porque has venido a recoger tu
Uruguayo
tengo que amarte amor
¡Sobre la noche infantil
(Dos alas de mariposa
imagen y eres mejor que todas tus
tengo que amarte
están despiertos los sueños!
le forman sobre
de esta
vuelos).
imágenes
aunque
herida duela como dos
Vienen sirviendo de pajes
Seelva el relente
porque eres linda desde el pie hasta
aunquea llevarlo
te busque y no te encuentre
angelitos ¡Sobre
maromeros,
¡Mirada
abierta
con
el correoinfantil
del viento
la noche infantil
alma
y
aunque
Entre las barbas nevadas
que visten están
trajesdespiertos
de nubes los sueños!
sobre
paisaje
sueños!
en la un
estafeta
deldeaire
porque eres buena desde el alma aymí
la
noche
pase
y
yo
te
tenga
se enredan niños los sueños.
lo recibe el santo viejo. y no. con estrellados
Vienenreflejos.
sirviendo de pajes
porque te escondes dulce en el orgullo
Mensaje de ingenuidades
tejidas
angelitos
maromeros,
pequeña y dulce corazón corazaHasta el mundo de aserrín, De azules bucles
escrito en hojas de trébol.
de los
luceros.
desde elinfantil
bazar deabierta
los cielos, las riendasque
¡Mirada
visten
trajes de nubes
la romería
en la noche
la luna Alumbrancon
sobretraza
un paisaje
de sueños!
estrellados reflejos.
Porque eres mía
(Dos alas de mariposa
Venus, Sirio
y los bucles tejidas
caminos amarillentos;
De azules
porque no eres mía
le forman sobre de vuelos). Hasta
Gemelos.
y en
un carrito
de brisas
el mundo
de aserrín,
las riendas de los luceros.
porque te miro y muero
Se va el relente a llevarlo desdetirado
pordedos
el bazar
losluceros,
cielos,
Alumbran la romería
y peor que muero
con el correo del viento
Venus, Sirio y los Gemelos.
si no te miro amor traza en la noche la luna
y en la estafeta del aire
San Nicolás
riela el éter,
caminos
amarillentos;
si no te miro
lo recibe el santo viejo.
ligero como el incienso!