geologia de la isla de santo domingo
Download
Report
Transcript geologia de la isla de santo domingo
Una placa tectónica o placa litosférica es un fragmento de litosfera que se
mueve como bloque rígido sin que ocurra deformación interna sobre la
astenósfera de la Tierra. La palabra tectónica deriva del griego τέκτων,
τέκτωνος: que significa constructor.
Tectónica de placas es una teoría que explica la estructura y la dinámica de
la superficie terrestre. Establece que la litosfera (la porción superior más
fría y rígida de la Tierra) está fragmentada en una serie de placas que se
desplazan sobre la astenósfera. Esta teoría también describe el movimiento
de las placas, sus direcciones e interacciones. La litosfera terrestre está
dividida en placas grandes y en placas menores o micro-placas. En los
bordes de las placas se concentra actividad sísmica, volcánica y tectónica.
Esto da lugar a formación de grandes cadenas y cuencas.
La Tierra es el único planeta del sistema solar con placas tectónicas activas.
LA ISLA ESTÁ
DIVIDIDA EN
8 BLOQUES
FALLADOS,
COMO SE
OBSERVA EN
EL MAPA
Un terremoto (del Latín terrae ‘tierra’ y motus ‘movimiento’),
también llamado seísmo o sismo (del griego "σεισμός",
temblor) o temblor de tierra, es una sacudida del terreno que
se produce debido al choque de las placas tectónicas y a la
liberación de energía en el curso de una reorganización brusca
de materiales de la corteza terrestre al superar el estado de
equilibrio mecánico. Los más importantes y frecuentes se
producen cuando se libera energía potencial elástica
acumulada en la deformación gradual de las rocas contiguas al
plano de una falla activa, pero también pueden ocurrir por
otras causas, por ejemplo en torno a procesos volcánicos o por
hundimiento de cavidades cársticas.
El origen de los terremotos se encuentra en la acumulación de
energía que se produce cuando los materiales del interior de la
Tierra se desplazan, buscando el equilibrio, desde situaciones
inestables que son consecuencia de las actividades volcánicas y
tectónicas, que se producen principalmente en los bordes de la
placa.
Aunque las actividades tectónicas y volcánicas son las principales
causas por las que se generan los terremotos, existen otros muchos
factores que pueden originarlos:
Desprendimiento de rocas en las laderas de las montañas
Hundimiento de cavernas
Variaciones bruscas en la presión atmosférica por ciclones
Etc.
Los terremotos tectónicos se suelen producir en zonas donde la
concentración de fuerzas generadas por los límites de las placas
tectónicas da lugar a movimientos de reajuste en el interior y en la
superficie de la Tierra. Es por esto que los sismos de origen tectónico
están íntimamente asociados con la formación de fallas geológicas.
Suelen producirse al final de un ciclo denominado ciclo sísmico, que
es el período durante el cual se acumula deformación en el interior
de la Tierra que más tarde se liberará repentinamente. Dicha
liberación se corresponde con el terremoto, tras el cual la
deformación comienza a acumularse nuevamente.
El punto interior de la Tierra donde se produce el sismo se denomina
foco sísmico o hipocentro, y el punto de la superficie que se halla
directamente en la vertical del hipocentro —y que, por tanto, es el
primer afectado por la sacudida— recibe el nombre de epicentro.
El movimiento sísmico se propaga mediante ondas
elásticas (similares al sonido), a partir del hipocentro. Las
ondas sísmicas se presentan en tres tipos principales:
Ondas longitudinales, primarias o “P”, tipo de ondas de
cuerpo que se propagan a una velocidad de entre 8 y 13
km/s y en el mismo sentido que la vibración de las
partículas. Circulan por el interior de la Tierra, atravesando
tanto líquidos como sólidos. Son las primeras que
registran los aparatos de medida o sismógrafos, de ahí su
nombre "P".
Ondas transversales, secundarias o “S”, son ondas de cuerpo
más lentas que las anteriores (entre 4 y 8 km/s) y se propagan
perpendicularmente en el sentido de vibración de las
partículas. Atraviesan únicamente los sólidos y se registran en
segundo lugar en los aparatos de medida.
Ondas superficiales, son las más lentas de todas (3,5 km/s) y
son producto de la interacción entre las ondas P y S a lo largo
de la superficie de la Tierra. Son las que producen más daños.
Se propagan a partir del epicentro y son similares a las ondas
que se forman sobre la superficie del mar. Este tipo de ondas
son las que se registran en último lugar en los sismógrafos.
Los efectos de un terremoto pueden ser
uno o más de los que se detallan a
continuación:
Movimiento y ruptura del suelo
El movimiento y la ruptura del suelo son
los principales efectos de un terremoto
en la superficie terrestre, debido al roce
de las placas tectónicas, causando
daños a edificios o estructuras rígidas
que se encuentren en el área afectada
por el sismo. Los daños en los edificios
dependen de la intensidad del
movimiento, la distancia que existe ente
la estructura y el epicentro, y las
condiciones
geológicas
y
geomorfológicas que permite una mejor
propagación de onda.
Terremotos, junto a
tormentas, actividad
volcánica
y
marejadas , pueden
producir
inestabilidad en los
bordes de cerros y
otras elevaciones de
tierra
lo
que
producen
corrimientos en la
tierra.
El fuego puede ser
producido por el corte
en
el
suministro
eléctrico acompañado
por daños a la red de
gas
de
grandes
ciudades.
Un
terremoto destacado
con este tipo de
suceso
fue
el
terremoto de 1906 en
San Francisco, donde
el fuego causó más
víctimas que el mismo
sismo.
La
licuefacción
ocurre
cuando, por causa del
movimiento,
el
agua
saturada de material (como
arena)
pierde
temporalmente
su
cohesión y se transforma
desde un estado sólido a un
líquido. Este fenómeno
puede producir que las
estructuras rígidas, como
edificios y puentes, se
derrumben en el terreno
cuya composición pasó al
estado líquido.
Los tsunamis son ondas marinas que
viajan desplazando una gran cantidad
de agua hacia las costas. En el mar
abierto, la distancia entre las crestas
de las ondas marinas son cercanas a
los 100 km, y los períodos varían
entre cinco minutos y una hora. Los
tsunamis pueden viajar entre 600 y
800 km/h, dependiendo de la
profundidad del agua. Los tsunamis
pueden
desplazarse
grandes
distancias a través del océano,
llegando desde un continente a otro.
La isla de Santo Domingo se encuentra en una zona de
alto riesgo sísmico, la cual está localizada en el borde de
la interacción entre las placas de Norteamérica y Caribe,
cuyo historial de sismos muestra seis devastadores
terremotos ocurridos en la costa norte en los años
1562, 1783, 1842, 1887, 1904 y 1946, así como un
sismo de 6.5 grados en la escala de Richter, ocurrido el
22 de septiembre de 2003, el cual hizo colapsar
importantes escuelas y edificaciones de la ciudad de
Puerto Plata.
Hasta la ocurrencia del pasado movimiento telúrico, del
12 de enero 2010, que destruyó la capital haitiana, uno
de los más desastrosos fue el sismo de 8.1 grados en la
escala de Richter ocurrido el 4 de agosto de 1946 al
noreste de Nagua, el cual generó un maremoto que asoló
la comunidad de Matanzas.
O sea que desde el citado terremoto del 1946 “no
habíamos registrado, al menos en nuestro país, un
fenómeno tan grande como este”.
Entre los más importantes terremotos ocurridos en el país,
citamos a continuación el año en que ocurrió c/u.:
En 1551 destrucción de la ciudad de la Vega y Santo Dgo.
En 1562 son destruidos Santiago y La vega y Puerto Plata
sufre daños.
En 1614 hubo un terremoto que dañó seriamente a Santo
Domingo. Hubo réplicas por 42 días.
En 1673 mueren 24 personas y la ciudad de Santo
Domingo, destruida, réplicas por 40 días.
Año 1691 fue la destrucción de Azua y daños en Santo
Domingo.
En 1751 Azua destruida, ruinas en el Seibo, daños en Santo
Domingo, Puerto Príncipe y en Croix-des-Bouquets en Haití,
también se produjo un maremoto, este sismo afecto todo el
sur de la isla.
En 1761 Sentido en todo el sur Azua destruida de nuevo,
daños en Neiba, San Juan; se sintió en La Vega, Santiago y
Cotuí.
En 1842 Catástrofe en toda la isla, maremoto en las costas
del norte, 5,000 a 6,000 muertos en Haití, destruidas
Santiago, Cabo Haitiano y Mole Saint-Nicolás, muchos
edificios destruidos en Santo Domingo.
En el 1897 Santiago, Guayubín, Guanabano-abajo,
Altamira, Navarrete. Catedral y Palacio de Gobiernos en
ruinas. Roturas del cable submarino de Puerto Plata,
deslizamiento en las montañas al norte de Santiago.
El 4 de Agosto del año 1946 sismo de magnitud 8.1 en el
nordeste del país produjo daños en todo el país, causó
maremoto en Nagua, y borró así la población pesquera de
Matancitas, este fue uno de los sismos mayores del siglo XX.
1551, 1959,1562, 1671, 1672, 1673, 1684, 1687, 1691,
1701, 1713, 1734, varios en 1751, 1753, 1754, 1755,
1761, 1764, 1765, 1766, 1770, 1771, 1775, 1776, 1783,
1793, 1805, 1842, 1843, 1852, 1855,1868, 1881, 1887,
1897, 1904, 1909, este afectó considerablemente a San
Cristóbal, 1911, 1946, 1961, 1962, 2003, en Puerto Plata
con más de 200 réplicas, 2008, más de 215 temblores de
los cuales 19 ocurrieron en el mes de julio, 2009, en Villa
Altagracia, 2010, en Puerto Príncipe y varios en el 2012,
sólo en el mes de enero.
PRIMERO QUE TODO "MANTENER LA CALMA"
Es la actitud adecuada. No es fácil conservarla, pero el
pánico lleva a tomar decisiones peligrosas e inútiles como
retornar nuevamente a las edificaciones en busca de algo,
aún sabiendo que pueden ocurrir replicas del sismo, y,
sobre todo provoca el caos, que puede resultar más
peligroso que el mismo terremoto.
El movimiento de tierra durante un terremoto rara vez es la
causa directa de muertos o heridos, estas resultan de la
caída de murallas, rotura de vidrios y objetos que caen, por
lo tanto, mantener la calma y protegerse eficientemente es
primordial.
Si está en el interior de un edificio es
importante que:
Buscar refugio debajo de los “dinteles” de las puertas o
de algún mueble sólido, como mesas o escritorios, o bien,
junto a un pilar o pared maestra.
Mantenerse alejado de ventanas, cristaleras, vitrinas,
tabiques y objetos que pueden caerse y llegar a golpearle.
No utilizar el ascensor, ya que los efectos del terremoto
podrían provocar su desplome o quedar atrapado en su
interior.
Eso depende del lugar en el que
se
encuentre.
La salida tiene sus riesgos,
especialmente si desconoce las
vías de escape o no son seguras.
O si está más arriba de un 2do.
piso, es difícil que logre salir
antes a la calle o patios antes de
que
termine
el
sismo.
El destino de la evacuación será
un área abierta, predeterminada
y conocida por todos, verifique
que todos están bien y afuera. Además, el plan de evacuación debe
designar previamente responsables
para apoyar a las personas.
Utilizar linternas para el alumbrado y evitar el uso de
velas, cerillas, o cualquier tipo de llama durante o
inmediatamente después del temblor, que puedan
provocar una explosión o incendio.
Haga simulacros y
ejercite sus medidas
preventivas,
una
persona o un grupo
con base a las
prácticas
previas
actuarán con mayor
prudencia en caso de
que se presente la
emergencia.
Ir hacia un área abierta, alejándose de los edificios
dañados. Después de un gran terremoto, siguen otros más
pequeños denominados réplicas que pueden ser lo
suficientemente fuertes como para causar destrozos
adicionales.
Procurar no acercarse ni penetrar en edificios dañados. El
peligro mayor por caída de escombros, revestimientos,
cristales, etc., está en la vertical de las fachadas.
Si se está circulando en coche, es aconsejable permanecer
dentro del vehículo, así como tener la precaución de alejarse
de puentes, postes eléctricos, edificios degradados o zonas
de desprendimientos