Transcript Cómo desarrollar la Misión Continental

PROCESO
DE RENOVACIÓN PASTORAL
DE LA PARROQUIA
DESDE LA NUEVA
EVANGELIZACIÓN
DESARROLLO DE LA
MISIÓN CONTINENTAL
EN LA ARQUIDIÓCESIS
EL CÓMO
I.
LA PREPARACIÓN
- La Parroquia está preparada, cuando ya ha:
1. Elaborado sus planos y está debidamente sectorizada
2. Realizado su censo y lo tiene debidamente tabulado
3. Conformado su equipo misionero y lo ha preparado
4. Dispuesto todo para el Curso Bíblico
5. Motivado y sensibilizado a la feligresía
Los misioneros están preparados
remotamente cuando:
1. Han vivido su propio proceso
de evangelización
Se han encontrado con Jesucristo,
viven en estado permanente de
conversión, como discípulos)
2. Pertenecen a una Pequeña Comunidad, a un Movimiento
Apostólico, a una Comunidad Religiosa, o a la Pastoral
Parroquial.
- Y tienen una preparación próxima cuando:
1. Conocen y han estudiado el folleto “¿Ya lo tienes tú?”
(su profundización se encuentra en las páginas 140-143
del “Manual del Discípulo Misionero”
2. Conocen y han estudiado el presente subsidio.
Los diferentes planes de pastoral proponen la organización
de las Parroquias apoyadas por un Consejo Parroquial de
Pastoral; este equipo es el encargado de animar todo el
proceso de pastoral y, desde luego, el proceso de la Misión
Continental.
Uno de los objetivos de la Misión, e igualmente uno de los
frutos, es fortalecer el Plan de Pastoral, pues es la ocasión
para revisar y completar la organización Parroquial.
Renovación parroquial a través del Proceso de la Nueva
Evangelización.
II. Anuncio del kerigma casa por casa
Ya llega el momento de hacer realidad el mandato de Jesús:
"Vayan y anuncien..." (Mt 28,20). De acuerdo con el Plan
de Pastoral, con esta Misión Continental se quiere que el
nombre de Jesús sea escuchado y aceptado por todo el
pueblo.
Y como se hace en las misiones del Sistema Integral de
Nueva Evangelización, se va al encuentro de todos
empezando por la visita a los hogares, ya que la casa es
el ambiente propio de cada persona si se tiene en cuenta
la importancia de las familias en la vida personal y social.
En estas visitas casa por casa nosotros somos los
instrumentos de Jesús, quien dice a cada persona:
"Mira que estoy a la puerta y llamo; si alguien escucha mi
voz y me abre, entraré en su casa a comer, Yo con él y él
conmigo" (Ap 3,20).
Para que estas visitas casa por casa den el resultado
esperado se necesita dar pasos muy concretos que se
detallarán a continuación.
Antes de comenzar la Misión
Primer Paso:
Carta del Párroco a las familias invitando a la Misión
Continental y a recibir con alegría los misioneros
(puede ser un volante impreso).
Los jefes de sector distribuyen la carta del Párroco
convocando a la Misión Continental y creando el
ambiente propicio para recibir la visita y para el anuncio
del kerygma.
Segundo Paso:
Distribuir la visita por las casas.
Para realizar la visita los misioneros irán siempre en
parejas, siguiendo el ejemplo de Jesús que “los envió de
dos en dos delante de sí, a todas las ciudades y sitios a
donde él había de ir” (Lc 10,1).
Ya que se tienen jefes de sector y subsector, se facilitará
mucho la distribución de las visitas a las casas.
Desde el comienzo de la formación se debe incentivar a
los participantes a la conformación de los equipos de
visitadores.
Se deben tener en cuenta estos criterios:
- Los Jefes de Sector acompañarán a los misioneros. Deben
ayudarles a ubicar las casas que les han sido asignadas y a
resolver los problemas que puedan presentarse. Y estarán
pendientes de que no se quede ninguna casa sin visitar.
- El Párroco, el Consejo Parroquial y el Ministerio de
Evangelización, con su coordinador a la cabeza, deben estar
muy atentos al trabajo de los equipos misioneros en la visita
casa por casa.
- El Párroco hará el envío de los misioneros con una
celebración especial en la Parroquia. Ellos no van por su
cuenta, ni a predicarse a sí mismos, sino en nombre de Cristo
que los envía a través de su Iglesia.
III. Orientaciones para los misioneros
Las siguientes orientaciones pueden ser aplicadas en
cualquier situación cuando se visiten los hogares:
- Confíe en el Señor, no en la
habilidad humana o en métodos,
para un ministerio efectivo.
- No se preocupe por los resultados.
Los triunfos o los fracasos no
pueden ser determinados desde
un punto de vista humano.
- Siempre y cuando el visitador plante la semilla del amor,
el Señor se encargará de la cosecha.
- Con su propio entusiasmo y espiritualidad haga que Jesús
y la Iglesia sean atractivos para los demás. Las acciones
dicen más que las palabras.
- Al visitar, trate de evitar las horas de comidas u otros
momentos que puedan ser un inconveniente para la
familia.
- Mida el tiempo de la visita
cuidadosamente. No se haga tan
corta que no haya tiempo para
comunicarse adecuadamente,
ni tan larga que se haga aburrida.
- Recuerde que las personas están en
diferentes niveles de desarrollo espiritual
y requieren de enfoques diferentes. Determine de
antemano las necesidades de las personas y elabore su
plan de acuerdo a tales necesidades.
- Organice el plan de visitas para que nadie sea pasado
por alto o se le haga sentir sin importancia.
- Sea sincero. Las personas se dan cuenta cuando uno no
lo es. Así que no trate de fingir nada.
- Esfuércese, sin ser impertinente,
por involucrar en la Iglesia a la
persona visitada, empezando con
su participación en la Misión.
- Haga que la persona se sienta
importante, pues nadie más puede
ocupar su lugar en el Cuerpo de Cristo,
y la persona debe saberlo. Es bueno decírselo.
- Aunque el entrenamiento para este ministerio es útil,
el verdadero requisito para un evangelizador efectivo
es un corazón lleno de amor.
- No se desanime, ni se preocupe por las experiencias
negativas.
- El seguimiento es indispensable.
Siga asistiendo con su oración a las
personas que ha visitado. Los jefes
de sector les darán seguimiento
llevando las comunicaciones del
Párroco a su pueblo.
- No olvide que este ministerio se realiza
por amor al Señor y al prójimo. Jesús dice: “En verdad
les digo que cuanto hicieron con alguno de estos mis
hermanos más pequeños, lo hicieron conmigo” (Mt 25,40).
- Nunca discuta. La polémica a nada lleva, ni es el
propósito de una visita evangelizadora. No se deje
provocar por personas que le insulten, desprecien el
mensaje o quieran discutir de religión, de política, de
deportes o de otros temas.
Aparecida sugiere tres cualidades básicas
para que el discípulo y la discípula inicien
este camino: la gratitud, la alegría y la
actitud de donación, siendo siempre
portadores de buenas noticias hasta
los lugares más alejados.
¿Cuáles son las cualidades básicas del discípulomisionero para emprender la Misión Continental?
En el momento de la visita evangelizadora en cada casa
Los misioneros asignados a cada sector anunciarán el
Evangelio puerta a puerta, sin saltar ni correr, hasta visitar
todas las familias asignadas.
En estas visitas se seguirá este proceso:
- Al llegar a la casa: saludan con amabilidad y se identifican
como católicos para darse a conocer desde el primer
momento.
- Familiarizarse con las personas: se presentan, dicen sus
nombres, de dónde vienen y dicen por qué están
visitándolos. Se interesan por conocer sus nombres.
- Testimoniar la propia experiencia personal del Señor y
de su Iglesia: uno de los mensajeros da su propio
testimonio, con las características que se han indicado.
Puede seguir este modelo:
Hoy hermano(a) te traemos una Buena Noticia, y es que
Dios te ama, a ti personalmente, en forma incondicional,
ese amor es para ti, Él toma la iniciativa.
Pero nosotros no lo podemos percibir y nos alejamos por
el pecado, el cual nos impide recibir ese amor que Dios
quiere darnos.
Pero ¡qué bueno que hemos recibido esa Buena Noticia
para que tú y yo, seamos salvos!
Es que en su infinito amor nos dio a su Hijo único amado,
para que el que crea en Él no se pierda y tenga vida
eterna; por eso Él murió en la Cruz por ti y por mí,
pagando a precio de sangre nuestra salvación.
Él quiere que hagas tuya esa salvación por la fe, quiere
que tú creas en Él, que le creas a Él y, creyendo en Él,
haya un cambio en tu vida, que es la conversión, que no
es cambiarte de Iglesia sino un cambio de corazón y de
vida y que lo reflejes a Él.
Esto lo logramos cuando recibimos el Espíritu Santo,
Espíritu de verdad, de vida y alegría, y así Él nos capacita
para vivir una vida en comunidad, con la Iglesia, con los
hermanos que viven la misma fe.
- Luego se le hace esta pregunta directa y de frente:
¿Quiere usted aceptar a Jesucristo en su corazón como su
Señor y Salvador?
Y se invita a la persona a que acepte a Jesús en su corazón
y a orar juntos: ¿Quiere usted que oremos juntos, para
pedir por su entrega a Jesucristo y para avivar la presencia
del Espíritu Santo en su vida?
Entonces se hace una oración con la persona. Puede servir
este modelo:
Dios, Padre Nuestro, te alabamos y te bendecimos porque
nos amas.
Nos reconocemos pecadores y te pedimos perdón por
nuestros pecados.
Creemos que Cristo murió por nosotros, pagando con su
Vida por nuestros pecados.
Hoy abrimos nuestro Corazón a Ti y te aceptamos como el
único Salvador, Rey y Señor de nuestras vidas.
Te pedimos, Señor, que nos llenes de tu Espíritu Santo para
comenzar una Nueva Vida. Gracias Señor.
Antes de salir de cada visita se invita a todos los miembros
de la familia participar en la Casita de Reunión, o en los
encuentros en el Templo, indicándoles la dirección y la
hora y explicándoles brevemente el objetivo de esta
reunión con otros vecinos.
Igualmente se les entrega la hoja “Ya lo tienes tú?” con el
anuncio sintético del kerygma.
Después de la Visita
- Orar y evaluar:
Después de cada visita los misioneros continúan orando
por las personas visitadas. Además evaluarán su trabajo
preguntándose:
¿Cómo hemos servido al Señor en las visitas?
¿Qué cosas no quedaron bien?
¿Qué cosas pudieron hacerse mejor?
Así mismo se deben tomar notas, apuntar nombres,
opiniones, observaciones a fin de preparar mejor la forma
de presentar el anuncio en las próximas visitas.
La Parroquia debe elaborar un modelo de informe sobre
las visitas a las casas, y cada equipo misionero debe:
- Tener un cuaderno y, en hojas separadas, consignar
la información de cada casa visitada.
- Participar en la reunión de los equipos misioneros y
testimoniar sobre la acción de Dios en la visita
evangelizadora. Allí se evaluará y se planificará el
trabajo siguiente.
IV. Anuncio del
kerigma a grupos
En las Casas de Reunión
o en un lugar público del
sector o en el Templo
Las visitas a las casas tienen como objetivo que aquellos
que se decidan a seguir a Jesús se integren en la Iglesia,
o sea en las Pequeñas Comunidades existentes en la
Parroquia.
Por eso, es importante invitar a las familias a participar en
la Casa de Reunión o en algún acto masivo en el sector o
en el Templo, para que escuchen el anuncio del kerigma y
se integren a la comunidad o núcleo comunitario que surja
de esta Misión Continental.
Es bueno recordar unos
elementos propios del
Kerigma
que no pueden faltar:
- El kerigma es una proclamación a viva voz de Jesucristo
muerto, resucitado y glorificado. Esto quiere decir que lo
importante es que se anuncie y que se escuche. Aunque
se dé participación al grupo, lo más importante es que
los misioneros testimonien su experiencia de salvación.
- El kerigma es un anuncio actual para cada persona y
para la sociedad. No se trata sólo de un relato de algo
que sucedió ayer y que es muy interesante y nada más.
Es bueno recordar unos
elementos propios del
Kerigma
que no pueden faltar:
- El kerigma es el anuncio del “hoy” de la salvación de Dios
que es Jesucristo y que, vivo entre los hombres, anhela
que hoy ninguno endurezca su corazón, sino que acepte
la salvación de Dios en su propia vida.
- El kerigma es un anuncio directo a cada uno y a todo el
grupo. El objetivo es llegar a cada uno tocando el fondo
de su corazón, disponiéndolo para que tome una decisión.
Preparación en
las Casas de
Reunión, en un
lugar público
o en el Templo
Es importante que quienes proclamen el kerigma sean
personas que testimonien con alegría lo que Dios ha
hecho en ellos y lo comuniquen seguros de que Dios
puede hacer lo mismo en sus oyentes.
El mismo misionero por sí
solo está llamado a ser un
mensaje, un kerigma
viviente.
- Elaborar por escrito una agenda
de trabajo, especificando a quién
y cuándo le corresponde realizar
cada acción, con el tiempo
suficiente para su preparación
- Asegurar la música y las canciones que aporten alegría y
que estén de acuerdo con el tema del día. La música atrae
mucho a la gente; en nuestro país la música es un medio
eficaz para la evangelización.
- Seleccionar bien la casa o el local donde se reunirá la
gente. Todos los invitados deben saber la dirección y cómo
llegar allí. Es conveniente, cuando se trata de casas de
familia, que los dueños sean bien aceptados por todos.
- Los misioneros prepararán el tema, los cantos, los
momentos de oración, los signos y dinámicas de cada
encuentro mediante la oración y el estudio.
- Los misioneros son instrumentos
del Señor para realizar su obra en
ese grupo determinado. Todo lo
que se refiere a las personas es
importante que esté bien
dispuesto y a punto.
- El nerviosismo, las improvisaciones, las discusiones
o la inseguridad de los misioneros pueden perturbar
la escucha atenta del Evangelio.
- Es necesario crear un ambiente agradable y familiar
para el momento de la proclamación. Los misioneros
anfitriones tendrán todo a punto: decoración del lugar,
colocación de las sillas, limpieza, letreros de acuerdo con
el tema del día, flores y un lugar para la Palabra de Dios.
- También hay que acoger con
amabilidad a los participantes,
interesarse por ellos y buscar
por todos los medios que se
sientan como en su casa.
Esquema general para la reunión en
una casa de familia, un lugar público
o en el Templo
1. Recibimiento de los participantes y momento de
conversación espontánea.
Este primer momento es muy importante, sobre todo
para los que nunca han participado, para que se sientan
bien acogidos.
También es el momento apropiado para la conversación
libre y espontánea, los saludos, las presentaciones y los
comentarios generales de lo que acontece en el sector;
esto ayuda a los participantes a conocerse y a romper
la timidez que normalmente se da en el primer encuentro.
“ES HORA DE VOLVER A DIOS”
2. Cantos motivadores del tema.
Es bueno ensayar con el grupo que va llegando los cantos
que se usarán en este anuncio del kerigma.
El canto ayuda a interiorizar y a aprender más fácilmente
el mensaje.
Estos cantos deben ser vivos, alegres, entusiastas, que
lleven a entrar en el tema por tratar y que ayuden a crear
un ambiente propicio a la experiencia de Dios.
Los cantos serán más motivadores si son acompañados
con instrumentos.
“ES HORA DE VOLVER A DIOS”
3. Momento de oración.
Se invoca la presencia del Espíritu Santo para que sea Él
quien mueva los corazones e instruya a los presentes.
Es importante crear un ambiente de oración, sentados,
con los ojos cerrados, orar clamando para que la presencia
del Espíritu Santo actúe en medio de los presentes.
Es muy importante que la oración sea fluida, espontánea,
que haya alabanza y acción de gracias.
Se puede concluir ese momento con la siguiente oración:
ORACIÓN DE LOS PADRES DE FAMILIA
Señor Jesús:
Tú que santificaste en Nazaret la vida de familia
y que en María y José nos dejaste un ejemplo eximio
de amor desinteresado hacia los hijos, te pedimos
que llenes nuestro hogar con tu gracia y tu bendición.
Ayúdanos a educar cristianamente a nuestros hijos
y a amarnos el uno al otro con un amor sacrificado,
tierno y puro.
Concédenos el don de formar una familia verdaderamente cristiana,
que sea como una pequeña Iglesia doméstica.
Te pedimos por nuestros hijos: que crezcan sanos de cuerpo y alma,
que aprendan a amarse con sencillez y que nunca se separen de Ti.
Tuyos son, pues Tú nos los has dado y si quieres llamar a tu servicio
a alguno de ellos, regalándole el don de la vocación, nosotros
ofreceremos gustosos el sacrificio que imponga su lejanía física.
Más aún, te rogamos que te dignes poner tu mirada en nuestro hogar,
eligiendo a uno de nuestros hijos como el mayor don que podrías hacernos,
ya que tenemos la certeza de que será feliz contigo y hará un gran bien
a la Iglesia con su vida entregada a Ti y a tu Reino. Amén.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
4. Motivación del tema.
Se busca crear las condiciones para la escucha.
A partir del segundo día es bueno, antes del tema, recordar
rápidamente los temas anteriores para ubicar a los
participantes y a los que llegan por primera vez y conectar
el tema a tratar con lo que se ha dicho anteriormente.
(Hay que recordar que el tema tiene dos partes:
- El que corresponde al kerigma, siguiendo el orden temático
del plegable “¿Ya lo tienes tú?” (uno por día).
- Y el de aplicación a la familia de acuerdo con lo establecido
por el Señor Arzobispo).
ES HORA DE VOLVER A DIOS
- Para el tema correspondiente al Kerigma, se recomienda
utilizar la cartilla “Misiones II” con sus series de textos
bíblicos y preguntas, previamente escogidas.
- Para el tema sobre la familia, que estará vinculado al tema
del Kerigma, se propone:
- Hecho de vida
- Iluminación bíblica
- Exposición del tema
- Preguntas para dialogar
ES HORA DE VOLVER A DIOS
- Hecho de vida:
A la hora de evangelizar, es importantísimo partir de la vida,
de nuestro contexto personal, pues no buscamos teorizar,
ni ser demasiado doctrinales o dogmáticos, nunca podemos
olvidar que el kerigma es una experiencia personal que se
quiere comunicar a otros, por eso se puede contar una
historia que sea edificante.
A las personas les cuesta asimilar un concepto, pero no una
narración, un cuento, una historia de vida.
(HAY QUE EVITAR A TODA COSTA LEERLA, memorícela y
cuéntela con sus propias palabras).
ES HORA DE VOLVER A DIOS
- Iluminación bíblica: Se proclama el texto escogido para la
ocasión estando todos de pies, con muy buena entonación,
recordando que la Palabra de Dios tiene poder para
iluminar la vida.
- Exposición del tema: el mensaje que se quiere transmitir;
la persona escogida profundiza el tema del día en forma
clara y sencilla.
- Pregunta para el diálogo: se hacen una o varias preguntas
para dialogar buscando la mayor participación posible.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
5. Canto: Se entona la canción de la familia, escogida como
himno de la Misión Continental en la Arquidiócesis.
6. Oración final: A partir del tema, se hace un momento de
oración, pidiendo la actuación del Señor en cada uno para
poder hacer vida lo que se ha compartido en la Palabra.
Ayuda mucho hacer esta oración a partir de un signo que
permita interiorizar más lo que se ha tratado; a la gente le
llegan mucho los símbolos y le permiten vivir y captar más
el mensaje. También se puede hacer una oración especial
por algunos que la pidan. Se termina con el Padre Nuestro
y el Ave María.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
7. Compromiso: Se puede encomendar a cada quien un
pequeño compromiso para cumplirlo en su casa y en su
vida diaria hasta el próximo encuentro. Puede ser una
lectura bíblica, una oración, un gesto de amor hacia los
demás.
También se aprovecha para recordar el próximo encuentro
o dar cualquier otro aviso.
8. Abrazo de Paz: Cada participante debe salir bien
motivado para volver al próximo encuentro.
A manera de ejemplo
Se presenta un modelo de la reunión del primer día
para que sirva de guía a los evangelizadores, pues
no se pretende anular la creatividad de cada comunidad
parroquial para desarrollar la temática de acuerdo
a sus características.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
PRIMER DÍA:
Temas: EL AMOR DE DIOS PADRE.
LA FAMILIA, IMAGEN DEL AMOR DE DIOS.
Objetivo: Expresar, bajo la figura de la institución familiar, el gran
amor que Dios nos tiene.
Hecho de vida: El verdadero amor
Una historia que nos enseña a valorar el amor en el matrimonio:
“Un sabio maestro se encontró frente a un grupo de jóvenes que se
declaraban en contra del matrimonio. Los muchachos argumentaban
que el romanticismo constituye el verdadero sustento de las parejas y
que es preferible acabar con la relación cuando éste se apaga en lugar
de entrar a la hueca monotonía del matrimonio.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
El maestro les escuchó con atención y después les relató un
testimonio personal: ‘Mis padres vivieron 55 años casados.
Una mañana mi mamá bajaba las escaleras para prepararle a papá
el desayuno cuando sufrió un infarto y cayó. Mi padre la alcanzó,
la levantó como pudo y casi a rastras la subió a la camioneta. A toda
velocidad, condujo hasta el hospital mientras su corazón se
despedazaba en profunda agonía. Cuando llegó, por desgracia, ella
ya había fallecido.
Durante el sepelio, mi padre no habló, su mirada estaba perdida.
Casi no lloró. Esa noche sus hijos nos reunimos con él. En un
ambiente de dolor y nostalgia recordamos hermosas anécdotas.
Él pidió a mi hermano teólogo que dijera alguna reflexión sobre la
muerte y la eternidad. Mi hermano comenzó a hablar de la vida
después de la muerte. Mi padre escuchaba con gran atención.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
De pronto pidió que lo llevasen al cementerio.
‘Papá’ –respondimos- ‘¡Son las 11 de la noche! No podemos ir al
cementerio ahora!’ Alzó la voz y con una mirada vidriosa dijo:
- ‘No discutan conmigo, por favor, no discutan con el hombre que
acaba de perder a la que fue su esposa por 55 años’.
Se produjo un momento de respetuoso silencio. No discutimos más.
Fuimos al cementerio, pedimos permiso al celador y con una linterna
llegamos a la lápida. Mi padre la acarició, oró y nos dijo a sus hijos
que veíamos la escena conmovidos:
- ‘Fueron 55 buenos años... ¿saben? Nadie puede hablar del amor
verdadero si no tiene idea de lo que es compartir la vida con una
mujer así’. Hizo una pausa, se limpió la cara y continuó:
‘Ella y yo estuvimos juntos en todo. Alegrías y penas. Cuando
nacieron ustedes, cuando me echaron de mi trabajo…
ES HORA DE VOLVER A DIOS
Cuando ustedes enfermaban… Siempre estuvimos juntos…
Compartimos la alegría de ver a nuestros hijos terminar sus carreras,
lloramos uno al lado del otro la partida de seres queridos, rezamos
juntos en la sala de espera de muchos hospitales, nos apoyamos en
el dolor, nos abrazamos y perdonamos nuestras faltas... Hijos, ahora
se ha ido y estoy contento, ¿saben por qué?, porque se fue antes que
yo, no tuvo que vivir la agonía y el dolor de enterrarme, de quedarse
sola después de mi partida. Seré yo quien pase por eso, y le doy
gracias a Dios. La amo tanto que no me hubiera gustado que sufriera’.
Cuando mi padre terminó de hablar, mis hermanos y yo teníamos el
rostro empapado de lágrimas. Lo abrazamos y él nos consoló:
- ’Todo está bien hijos, podemos irnos a casa; ha sido un buen día’.
Esa noche entendí lo que es el verdadero amor. Dista mucho del
romanticismo y no tiene que ver con el erotismo.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
Más bien es una comunión de corazones que es posible porque
somos imagen de Dios. Es una alianza que va mucho más allá de los
sentidos y es capaz de sufrir y negarse cualquier cosa por el otro’.
Cuando el maestro terminó de hablar, los jóvenes universitarios no
pudieron debatirle. Ese tipo de amor les superaba en grande. Pero,
aunque no tuviesen la valentía de aceptarlo de inmediato, podían
presentir que estaban ante el amor verdadero. El maestro les había
dado la lección mas importante de sus vidas” .
ES HORA DE VOLVER A DIOS
Iluminación bíblica
De pies, con muy buena entonación, recordando que la Palabra de
Dios tiene poder, la persona encargada lee el siguiente texto:
“Entonces dijo Dios: ‘Hagamos al hombre a nuestra imagen,
conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar,
en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo
animal que se arrastra sobre la tierra’. Y creó Dios al hombre a su
imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”.
(Gén 1,26-27).
ES HORA DE VOLVER A DIOS
Exposición del tema
Se debe comenzar enfatizando en el anuncio kerigmático sobre el
amor de Dios, recordando que no es una lección que se dicta, sino
que un testimonio que se comparte. Sus verdades fundamentales
son:
a.
b.
c.
d.
Dios nos ama porque es nuestro Padre
Dios nos ama incondicionalmente porque Él es amor
El nos ama porque somos sus hijos
El nos amó primero
Luego se explican brevemente estas verdades.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
LA FAMILIA IMAGEN DE DIOS.
1. Dios es una familia.
¡Cuánto se puede conversar sobre Dios! Es un pozo infinito, que
nunca llegaremos a conocer del todo. Siempre descubriremos algo
nuevo en el “misterio” de Dios.
Hoy sólo queremos afirmar la dimensión comunitaria de Dios.
Por definición y esencia, el Dios cristiano es una comunión de
personas, de tres personas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
Dios “en el misterio más íntimo, no es una soledad, sino una familia”
(Juan Pablo II).
Es una comunidad de amor y de vida, en la que todo es común, hacia
dentro en la misma interioridad de Dios y hacia fuera en toda acción
o comunicación de sí a otros.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
En Dios, hay clara identidad de tres personas: tres personas distintas,
pero no contrapuestas entre sí, tienen igualdad de naturaleza, están
en íntima comunión entre sí, con propósitos comunitarios en el
quehacer como consecuencia de su “ser familia y comunidad”.
Una acción específica puede estar dirigida principalmente por una
de las Personas de la Trinidad. A ella se le atribuirá de manera
particular. Pero, en realidad, está realizada por las tres divinas
personas; así, la Creación se atribuye al Padre, pero es obra también
del Hijo y del Espíritu Santo; la Salvación, a Cristo, pero es el Padre
quien lo envía y es el Espíritu quien realiza la acción; la Santificación,
al Espíritu Santo, pero el Padre y Cristo están en el origen y en la
culminación del dinamismo santificador.
De este modo, se constata que la huella del Dios trinitario se
encuentra en todo y lo que existe.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
2. La familia y Dios.
“No es bueno que el hombre esté solo”, dijo Dios: por eso creó a la
mujer. Es una afirmación implícita de la dimensión comunitaria de la
creación: “creó Dios al ser humano a su imagen, hombre y mujer los
creó” (Gén 1,27-28).
La imagen de Dios (imagen trinitaria) está en el hombre y la mujer
considerados individualmente: en cada uno hay huellas de la Trinidad.
Son imagen de Dios, considerados también como pareja, los dos
unidos, pero considerados, sobre todo, en su familia, con los hijos.
Así se afirma abiertamente: la familia es imagen de Dios, del Dios
trino, Padre, Hijo y Espíritu Santo.
La familia es, pues, una comunión de personas, una comunidad de
vida y de amor.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
Función de la pareja es procrear, elevar, educar, construir la familia.
La familia es la primera comunidad; una comunidad natural. Se nace
para vivir en familia.
Llevamos en nuestra naturaleza, como un sello, la marca de la
comunidad familiar. Ese es el plan de Dios escrito en los seres
humanos y revelado verbalmente por Él mismo; plan de Dios que
se convierte en misión para cada ser humano.
La meta de Dios aparecía clara y hermosa: cada familia debía
reproducir la vida comunitaria de la Trinidad. Allí, hombre, mujer e
hijos, debían encontrar la felicidad y el gozo, un paraíso, pero por la
envidia del Diablo entró el pecado en el mundo. La pareja, ambos,
pecaron.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
Los primeros efectos negativos de la caída en pecado fueron la no
aceptación de responsabilidades y la división de la pareja: Eva y Adán
quisieron echar su culpabilidad en otro y se acusaron entre sí.
La armonía de la pareja quedó rota. El paraíso en la tierra también
quedó quebrado.
Luego vino el pecado de Caín, matando a su hermano Abel.
También el pecado hería la vida comunitaria en una de sus relaciones
fundamentales, la fraternidad.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
3. Misión de la familia hoy.
De acuerdo a la pedagogía de Dios, cada persona debía contribuir a
la construcción de la vida comunitaria, de la vida de la Trinidad, en
la tierra, con rostros humanos, aportando sus cualidades, esfuerzo y
trabajo. Nacíamos para ser familia; éramos ya familia, pero había
que construir la familia.
Un hecho grave, sin embargo, se introdujo en la historia y perturbó
profundamente toda la obra y el plan de Dios: el pecado.
Ahora la pareja y los miembros de la familia siguen siendo llamados,
con fuerza, desde su “misterio”, desde su “ser” más íntimo, al paraíso
del amor y la armonía en la comunidad familiar, pero cargan, al
mismo tiempo, con una fuerza negativa que lucha contra la felicidad
familiar.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
Ahora, siguen siendo llamados a construir la familia, pero han de
tener en cuenta un obstáculo que no estaba en los orígenes: una
fuerza de destrucción en el mismo seno de la familia, la fuerza del
pecado, fuerza que divide y rompe.
Ahora, Dios mismo sigue empujando su plan, la presencia de su amor
y su vida en la familia, pero hay un adversario envidioso al que los
seres humanos, engañados por él, abrimos las puertas para que entre
en nuestras existencias, siembre la semilla de la división y pueda
seguir atacando para que no se realice el proyecto divino y humano
de la vida comunitaria: la misión recibida de “dominar la creación”,
poniéndola a su servicio, de “crecer y multiplicarse”, “de formar
familia” (misión humana del hombre).
ES HORA DE VOLVER A DIOS
4. La familia, transmisora y defensora de la vida.
El varón y la mujer son cooperadores del Amor Creador de Dios.
Dios, creador del varón y la mujer a su imagen y semejanza, los llama
a una especial participación en su amor y al mismo tiempo en su
poder de Creador y Padre en la transmisión de la vida, responsable y
libremente: “Sean fecundos y multiplíquense y llenen la tierra”
(Gen 1,28).
El cometido fundamental de la familia es, pues, el servicio a la vida.
La vida es el don más precioso que Dios nos da.
Dios es el Dios de la vida. Su único dueño. Él la da y la quita. Él nos ha
llamado a la participación de su propia vida divina, y allí radica la
dignidad de todo ser humano.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
A través de la sexualidad integrada a su vocación, el varón y la mujer
conjugan el amor conyugal con la responsable transmisión de la vida;
y al confiárseles este don, se les confía también su cuidado.
La familia ha de ser defensora de la vida, porque es su santuario. En
ella se origina, crece y se desarrolla.
La vida humana comienza desde el instante de la fecundación y
termina en la muerte natural.
Por ser Dios su dueño, como se ha afirmado, y la pareja humana su
transmisora, el ser humano no puede interrumpirla (aborto, suicidio,
homicidio, eutanasia, hechos todos incluidos en el mandamiento “No
matarás”). Se recomienda explicar adecuadamente cada uno de estos
conceptos.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
PREGUNTAS PARA EL DIÁLOGO:
¿ Cuáles pueden ser las manifestaciones más claras de amor
en las relaciones matrimoniales y familiares?
¿Qué le falta a la familia de hoy, para ser el reflejo del amor
trinitario?
¿Cuáles son las actitudes fundamentales de la familia frente
a la transmisión y defensa de la vida?
ES HORA DE VOLVER A DIOS
SEGUNDO DÍA
Temas: EL PECADO NOS HA SEPARADO DE DIOS.
PECADOS CONTRA LA FAMILIA.
HECHO DE VIDA…
ILUMINACIÓN BÍBLICA…
EXPOSICIÓN:
(Se debe comenzar enfatizando en el anuncio kerigmático sobre el
amor de Dios, cuyas verdades fundamentales son…
Recuérdese que no es una lección que se dicta sino un testimonio que
se comparte)
- El problema del pecado
- La mala noticia
- Reconoce tu problema
ES HORA DE VOLVER A DIOS
ATADURAS FAMILIARES
1. La violencia intrafamiliar
2. La soledad de los hijos y de los esposos
3. Unión entre parejas de mismo sexo
4. Divorcio y diferencia con la nulidad
ES HORA DE VOLVER A DIOS
TERCER DÍA:
Temas: LA SALVACIÓN EN JESÚS.
EL MATRIMONIO.
Objetivo: Compartir las verdades fundamentales del matrimonio
como sacramento.
HECHO DE VIDA…
ILUMINACIÓN BÍBLICA…
EXPOSICIÓN: EL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO
- Naturaleza. Fines. Propiedades (unidad, indisolubilidad).
- Efectos. Consentimiento. Impedimentos. Obligaciones. Nulidad.
- Matrimonio civil, separación, divorcio.
- Otras ofensas: infidelidad.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
CUARTO DÍA:
Temas: HAZ TUYA LA SALVACIÓN.
LA UNIDAD FAMILIAR Y EL DESARROLLO SOCIAL.
Objetivo: Llevar a la aceptación del matrimonio como la voluntad de
Dios para nuestras vidas, presentar el matrimonio como una realidad
amada, querida y deseada por Dios.
HECHO DE VIDA… ILUMINACIÓN BÍBLICA…
EXPOSICIÓN: LA FAMILIA COMO PROTAGONISTA DE LA VIDA SOCIAL
a) El amor y la formación de la comunidad de personas.
b) La tarea educativa.
c) Dignidad y derechos de los niños.
d) Solidaridad familiar.
e) Familia, vida económica y trabajo.
ES HORA DE VOLVER A DIOS
QUINTO DÍA:
Temas: CONVERTIRSE ES VOLVER A DIOS.
LA ORACIÓN EN FAMILIA.
Objetivo: Guiar a los participantes para que se cree en los hogares
una disciplina en la vida de oración.
HECHO DE VIDA…
ILUMINACIÓN BÍBLICA…
EXPOSICIÓN: LA IMPORTANCIA DE LA ORACIÓN EN FAMILIA
1. Cómo orar en el hogar?
2. La “Lectio Divina”
3. Manual de oración
ES HORA DE VOLVER A DIOS
SEXTO DÍA
Temas: LLAMADOS A SER IGLESIA.
LA FAMILIA COMO PRIMERA EXPERIENCIA DE IGLESIA.
Objetivo: Procurar que cada participante reconozca que la fe se vive
en comunidad y se anime a integrarse a ella.
HECHO DE VIDA…
ILUMINACIÓN BÍBLICA…
EXPOSICIÓN: LA FAMILIA COMO “IGLESIA DOMÉSTICA”
1. La Iglesia como familia de Dios.
2. Primera experiencia de la Iglesia.
3. La participación de la familia en la vida de la Iglesia.
4. La familia como destinataria y agente de la Nueva Evangelización
(familia evangelizada y evangelizadora).