Lecciones de economía española

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Transcript Lecciones de economía española

ESTRUCTURA ECONÓMICA
ESPAÑOLA
Programa Senior
4º Ciencias Sociales
4º Humanidades
Alfonso Badiola Sánchez
Antonio de las Heras Pérez
Curso 2012-2013
OBJETIVOS DE LA ASIGNATURA
• Proporcionar al alumnado:
– conocimientos sobre la estructura económica
española,
– analizando en profundidad el marco del
mundo actual a través de los acontecimientos
ocurridos en los últimos años y
– utilizando un enfoque económico de análisis
2
PROGRAMA
(Temario de la asignatura)
• Capítulo 1. El crecimiento de la economía española: Antecedentes
históricos y evolución reciente.
• Capítulo 2. Las actividades productivas:
– 2.1 Sector Agrario;
– 2.2 Sector Industrial y Energético;
– 2.3 Construcción y Sector Servicios.
• Capítulo 3. Aspectos institucionales y distributivos.
– 3.1 Mercado de trabajo;
– 3.2 Distribución funcional y personal de la renta;
– 3.3 Distribución territorial de la renta.
• Capítulo 4. Aspectos institucionales II.
– 4.1 Sistema y mercados financieros;
– 4.2 Evolución reciente.
• Capítulo 5. Sector exterior.
• Capítulo 6. Sistema financiero y comercio exterior
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INSTRUMENTOS Y CRITERIOS DE
EVALUACIÓN
• Prácticas a lo largo del curso (30%)
• Examen (preguntas cortas) (70%)
– Es decir, la evaluación consistirá en dos
partes: un examen y una serie de prácticas:
• El examen tendrá 7 preguntas cortas con una
valoración de 1 punto cada una.
• Por su parte, las prácticas constituirán 3 puntos.
• El aprobado se obtendrá con, al menos, 5
de los 10 puntos.
4
BIBLIOGRAFÍA
• Banco de España (2010): Informe anual.
http://www.bde.es/webbde/SES/Secciones/Publicaciones
/PublicacionesAnuales/InformesAnuales/10/Fich/inf2010.p
df
• Fernández Díaz, A; Parejo Gámir, J.A. y Rodríguez Sáiz,
L. (2011): Política económica. Ed. McGraw Hill.
• García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de
economía española. 10ª Edición, Madrid. ThomsonCívitas.
• INE (2011): Encuesta de población activa.
http://www.ine.es/jaxi/menu.do?type=pcaxis&path=/t22/p1
33&file=inebase&N=&L=0
• OCDE (2010): Informe anual de la economía española.
http://www.oecd.org/dataoecd/33/22/46654901.pdf
• Pérez, J.I. et alia (2009): Entorno económico.
5
Instrumentos para su análisis. Ed. Pirámide.
• Tipo de asignatura: Obligatoria
– 4º CURSO, PRIMER CUATRIMESTRE
• Profesor/a Responsable:
– ALFONSO BADIOLA SANCHEZ (UNICAN)1 Cr.
• Otros profesores:
– ANTONIO DE LAS HERAS PÉREZ (UNICAN)1Cr.
• Guía Docente:
– http://www.unican.es/NR/rdonlyres/0001322f/uiwdpbd
oqgmaxqimjhsowpdnbxhtfpvp/Gu%C3%ADaS%C3%
A9niorestructuraeconomicaespa%C3%B1ola.doc
6
CAPÍTULOS I y II.
Profesor Alfonso Badiola Sánchez
Departamento de Economía
Correo: [email protected]
Twitter: @AlfonsoBadiola
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Capítulo 1.
El crecimiento de la
economía española:
Antecedentes históricos
y evolución reciente.
• García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas. (CAPÍTULO 1)
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Capítulo 1
(1.1) Introducción.
(1.2) Perspectiva histórica.
(1.3) Siglo XIX.
(1.4) Siglo XX.
(1.5) Siglo XXI.
(1.6) Conclusiones.
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(1.1) Introducción
• En los últimos dos siglos, España ha sufrido un
gran crecimiento económico.
• Esta crecimiento también se ha producido en el
resto de los países de la Europa occidental.
• En un contexto de afirmación del capitalismo
como orden social y económico.
• El origen de esto se sitúa en la Revolución
Industrial:
– Innovaciones mecánicas y de organización de la
producción.
– Cambios sociales e institucionales.
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(1.1) Introducción
• La historia contemporánea europea (desde
finales del siglo XVIII) se caracteriza por:
– Un movimiento ascendente de la renta real por
habitante.
– Grandes transformaciones productivas con un
cambio de la base agraria tradicional a un sistema
industrial y urbano.
– Reconocimiento pleno de la propiedad privada.
– Aumento del papel del mercado en la asignación de
bienes, servicios y factores productivos (tierra, trabajo
y capital).
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(1.2) Perspectiva histórica
• Los dos últimos siglos han sido fructíferos
en materia de crecimiento económico para
la nación española.
• El indicador más utilizado es la evolución
de la renta real per cápita.
• Puede compararse la evolución de
España en comparación con otros países
europeos, como se muestra en el Gráfico
1 de la siguiente diapositiva.
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(1.2) Perspectiva histórica
GRÁFICO 1
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de
economía española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
13
(1.2) Perspectiva histórica
• En el gráfico anterior se muestra la evolución
comparada de España, Italia, Portugal y Grecia
frente al promedio de los países hegemónicos
en la industrialización (Gran Bretaña, Francia y
Alemania), que representan el 100%.
• De esta representación gráfica pueden
extraerse tres conclusiones principales:
– En primer lugar, el retraso secular de la economía
española en relación con el promedio de Gran
Bretaña, Alemania y Francia. La convergencia real de
nuestro país ha sido tardía e incompleta, en materia
de bienestar (medido como renta por habitante).
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(1.2) Perspectiva histórica
– Seguidamente, puede compararse la situación
española con la de Italia, Portugal y Grecia.
• Puede resaltarse el hundimiento de la economía española
desde la década de 1930 hasta la de 1950; y el continuo
aumento desde finales de la década de 1960 hasta nuestros
días.
• Estos cuatro países siguen pautas comunes: niveles de
renta per cápita inferiores a los países industrializados; y un
fuerte crecimiento después de la Segunda Guerra Mundial
hasta nuestros días.
• Esto es debido, además de a ciertos condicionantes
geográficos, a la desigual distribución de la propiedad
agraria, a prácticas productivas más ineficientes, inadecuada
organización financiera estatal, la falta de tradición
empresarial y las escasas inversiones en capital físico,
tecnológico y humano.
15
(1.2) Perspectiva histórica
– Por último, debe destacarse que España no
constituye un caso particular sino que sigue la
tendencia propia de un país mediterráneo.
• Sufre un retraso inicial durante los siglos XVIII y
XIX.
• Durante el siglo XX sigue un proceso de
crecimiento con recesiones en los años 1930 y
1970, para seguir creciendo hasta la actualidad.
• El crecimiento de finales del pasado siglo se debe
a impulsos exteriores al crecimiento, como los
flujos comerciales y de capital y tecnología unido a
corrientes masivas de emigrantes.
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(1.2) Perspectiva histórica
• El Cuadro 1 muestra una comparativa
internacional con tasas medias anuales
acumulativas
CUADRO 1
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de
economía española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
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(1.3) Siglo XIX
• Durante el segundo tercio de este siglo, a partir de 1830,
se crean precondiciones industriales para el surgimiento
del capitalismo.
–
–
–
–
–
–
Desamortizaciones.
Fin del régimen señorial.
Abolición de la Mesta.
Se eliminan aduanas interiores y los privilegios gremiales.
Se ponen las bases del sistema bancario.
Se unifica el sistema tributario.
• Todo ello promueve la libre circulación de propiedades,
trabajo, capital, productos y servicios, algo esencial en
las sociedades capitalistas.
18
(1.3) Siglo XIX
• En las décadas de 1850, 1860 y 1870 se
realizan las bases materiales para ampliar la
capacidad productiva española.
–
–
–
–
Construcción de infraestructura ferroviaria.
Explotación de recursos del subsuelo.
Creación de entidades bancarias.
Innovaciones en la gestión y organización de
empresas.
• Leyes de ferrocarriles (1855), de Sociedades
Anónimas de Crédito (1856), de Bancos de
Emisión y uso de la peseta como moneda de
curso legal (1868).
19
(1.3) Siglo XIX
• Desde 1890 se inicia un proceso proteccionista
como respuesta a las importaciones masivas de
cereales americanos y rusos.
• Con ello la producción española consigue
conquistar el mercado nacional.
• Esto es posible gracias al apoyo de las vías
ferroviarias y la red telegráfica.
• Este proteccionismo afecta también a otros
sectores, como el textil, el siderúrgico o el
hullero.
20
(1.4) Siglo XX
• Desde comienzos del siglo XX se extiende y
diversifica el tejido industrial debido a:
– Innovaciones técnicas.
– La capacidad inversora de los capitales repatriados
de las colonias.
– La movilidad de capitales franceses, belgas, ingleses
y alemanes.
– El fomento de la producción nacional por parte del
Estado.
• La economía española no llega tarde a la
segunda revolución tecnológica.
21
(1.4) Siglo XX
• La tendencia descrita anteriormente se ve
truncada por la Guerra Civil (1936-1939) y
la consecuente posguerra:
– Produciéndose un importante colapso
económico.
– Aumentando las diferencias en bienestar
económico frente a otros países europeos.
– Evitando, además, tanto la recuperación
económica de la crisis de 1929 como la
entrada en el Plan Marshall.
22
(1.4) Siglo XX
• A partir de la década de 1950 se inicia un
proceso de apertura y convergencia, una etapa
de crecimiento extraordinario, situándose
España entre los países con mayor grado de
crecimiento económico.
• Con la llegada de la democracia en los años
1970, España ha situado su crecimiento por
encima del promedio de los grandes países
europeos.
• El afianzamiento de la democracia ha permitido
la construcción de un sistema de bienestar
social con grandes recursos públicos.
23
(1.5) Siglo XXI
• Con la incorporación plena a la Unión Europa en
1986 se han:
– Aumentado las capacidades creativas.
– Aumentado el crecimiento económico.
– Producido grandes transformaciones estructurales.
• El crecimiento de la tasa de variación del PIB
español creció con la adopción del euro como
moneda oficial en 2002 (ver Gráfico 2). Aunque,
desde 2008, nuestro país está inmerso en un
proceso de ajuste que ha hecho que dicha tasa
de variación sufra un ajuste.
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(1.5) Siglo XXI
GRÁFICO 2
FUENTE: http://www.libertaddigital.com/economia/el-hundimiento-de-laproduccion-espanola-en-graficas-1276357107/
25
(1.5) Siglo XXI
• El Cuadro 2 contiene algunas cifras sobre la
Unión Europea. Del mismo, pueden extraerse
unas conclusiones sobre nuestro país:
– Dentro de la Unión Europea de los 15, España es el
segundo país por superficie territorial y el quinto por
número de habitantes.
– España es el quinto país con mayor PIB de esta
región.
– Pero, si tenemos en cuenta el PIB per cápita, España
es el duodécimo país de la UE15.
26
CUADRO 2
27
(1.5) Siglo XXI
• En el Gráfico 3, puede observarse un rápido
aumento del PIB per cápita y convergencia con
la media de la UE15 entre 1960 y 1975.
• Entre 1975 y 1984 pueden observarse los
efectos de una crisis económica española que
hacen que se diverja con Europa en materia de
crecimiento económico.
• Desde la entrada a la UE en 1986 hasta
nuestros 2010 el comportamiento se asemeja al
de la UE15 (aumento de 1990 a 2007 y crisis a
partir de 2008).
28
(1.5) Siglo XXI
GRÁFICO 3
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de
economía española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
29
(1.5) Siglo XXI
• En el Cuadro 3, se muestra la distribución
porcentual del empleo entre las
actividades productivas para varios países
en los años 1960, 1985 y 2010.
– Es destacable el gran cambio desde la
agricultura y pesca al sector servicios en los
países menos desarrollados.
– También hay un descenso generalizado en el
empleo agregado de la industria.
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(1.5) Siglo XXI
CUADRO 3
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de
economía española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
31
(1.6) Conclusiones
• En este primer capítulo se han descrito los antecedentes
históricos y la evolución reciente de la economía
española.
• España partió retrasada del proceso de industrialización
de finales del siglo XVIII.
• La evolución del crecimiento de nuestra economía ha
sido similar a la de otros países mediterráneos, hasta
llegar a converger con los grandes países europeos.
• Esto ha sido posible gracias a cambios institucionales,
legales, organizativos, infraestructurales y financieros.
32
(1.6) Conclusiones
• Desde la entrada a la Unión Europea en 1986, el
crecimiento relativo del PIB per cápita de nuestro país
se asemeja al de la Unión Europea de los 15.
• Pero, en cambio, el estado de bienestar es aún
incompleto, dados los bajos niveles de PIB per cápita en
el contexto de la UE15.
• Ha habido un cambio en el empleo de los sectores
productivos, perdiendo importancia la agricultura y la
industria en favor del sector servicios.
• Desde el año 2008, España está inmersa en un periodo
recesivo, al igual que el conjunto de la Unión Europea,
ya que las tasas de variación del PIB presentan niveles
negativos.
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Capítulo 2.
Las actividades
productivas.
• García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas. (CAPÍTULOS 7 a 11)
34
Capítulo 2
(2.1) Introducción.
(2.2) Sector Agrario.
(2.3) Sector Industrial y Energético.
(2.4) Construcción y Sector Servicios.
(2.5) Conclusiones.
35
(2.1) Introducción.
• En este segundo capítulo se
describirá la situación de los sectores
productivos de la economía española
en los últimos años.
• De esta forma, se analizará la
evolución de los sectores agrario,
industrial-manufacturero, energético,
construcción y servicios.
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(2.2) Sector agrario.
37
(2.2) Sector Agrario.
• Uno de los principales cambios estructurales
asociados al crecimiento económico es la
pérdida de peso del sector agrario.
• Pese a ello, su peso relativo aún sigue siendo
importante dentro de la economía española.
• No debe concluirse que la agricultura
obstaculiza a las actividades secundarias y
terciarias.
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(2.2) Sector Agrario.
• La contribución de la agricultura al crecimiento
económico depende de la etapa de desarrollo:
– En las fases iniciales, la industria y los servicios
demandan de la agricultura mano de obra y recursos
financieros.
– En etapas más avanzadas, los agricultores deben asumir
labores relacionadas con la conservación y mantenimiento
de los espacios rurales y del medio. Además, se exige una
agricultura altamente competitiva.
• El sector agrario desarrolla un estratégico papel en la
economía mundial, especialmente en los procesos de
desarrollo y las funciones medioambientales.
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(2.2) Sector Agrario.
• El Cuadro 1 muestra la producción y superficie por
orientaciones agrarias en España en los años 1987 y 2007.
– Se denominan extensivas aquellas cuyo peso territorial
(superficie) es superior a su cuota productiva.
– Por su parte, son intensivas aquellas cuyo peso territorial
(superficie) es inferior a su cuota productiva.
• Así, podemos observar, que España la agricultura general;
ovinos y caprinos; y las orientaciones mixtas son claramente
extensivas. Por contra, horticultura; frutales y cítricos; y
granívoros, son intensivas.
• Dos de las actividades más expansivas, viticultura y olivar,
han pasado de ser expansivas en 1987 a intensivas en 2007.
40
(2.2) Sector Agrario.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
41
(2.2) Sector Agrario.
• El ingente crecimiento económico acontecido en la
economía española durante el período 1960-1975
(como vimos en el Capítulo 1) fomentó el abandono
de la agricultura tradicional, caracterizada por:
– Mano de obra abundante y mal pagada.
– Baja relación capital-producto por uso de técnicas de
producción atrasadas.
– Equilibro entre la oferta de alimentos y una demanda
poco diversificada en concordancia con el bajo nivel
de renta per cápita.
42
(2.2) Sector Agrario.
• La emigración rural provocó una fuerte sustitución
de trabajo por capital.
• La urbanización y la mejora del nivel de vida
modificaron la composición de la demanda.
– Exigencias europeas.
– Liberalización de los intercambios.
– Demanda de servicios ambientales.
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(2.2) Sector Agrario.
• En el Cuadro 2 se muestra la posición del sector
agrario en el conjunto de la economía española
desde 1985 a 2010. Es destacable su decreciente
participación en las cifras macroeconómicas
estatales:
– En el período 1985-2010, su cuota en la producción
se ha reducido del 6,5 al 2,7% del Valor Añadido
Bruto agregado.
– La población ocupada en este sector ha pasado de
un 15,9% en 1985 a sólo un 4,5% en 2010.
– En cambio, el sector agroalimentario conserva un
importante peso en el comercio exterior, incluso con
una tendencia alcista.
44
(2.2) Sector Agrario.
• Así, este sector ha perdido importancia en
nuestra economía, al igual que ha sucedido en
el conjunto de los países desarrollados, debido
a:
– Modificaciones en las preferencias de los
consumidores.
– La oferta agraria se constituye como output
intermedio.
– Externalización de actividades.
– Sustitución de inputs agrarios por otros de los
sectores industrial y servicios.
45
(2.2) Sector Agrario.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
46
(2.2) Sector Agrario.
• Un hecho destacable es la creciente
integración internacional que ha
experimentado el sector agrario español.
– Aunque ciertas frutas, el vino y el aceite de
oliva han sido tradicionalmente exportados, la
mayor parte del output tenía como destino la
demanda interna.
– En los últimos veinticinco años el coeficiente
de apertura externa de la agricultura española
se ha multiplicado por 2,5.
47
(2.2) Sector Agrario.
• Pueden estudiarse lo principales indicadores del
comercio exterior agroalimentario de nuestro país
mediante el Cuadro 3.
• Se observar el creciente aumento del coeficiente de
apertura externa, pasando de un 52,0 a un 133,4,
gracias a:
– El encuadramiento de nuestro sector agrario en la Europa
Verde.
– La desviación de comercio a favor de los socios
comunitarios.
– La liberalización en el marco de la Organización Mundial
del Comercio.
– La zona de libre comercio entre la Unión Europea y los 48
países de la ribera meridional del Mediterráneo.
(2.2) Sector Agrario.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
49
(2.2) Sector Agrario.
• La oferta agraria española ha sufrido
transformaciones como respuesta a:
– La renovada demanda de alimentos,
– Las nuevas disponibilidades de factores y
– El cambiante marco institucional.
• Los factores explicativos de la estructura
productiva de la agricultura española y su
evolución son:
– La demanda interna.
– Los mecanismos de protección frente a la
competencia exterior.
– Las ventajas comparativas existentes.
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(2.2) Sector Agrario.
• En el Cuadro 4 contiene valores sobre la
evolución de la cuota española en la producción
agraria de la Unión Europea.
– Ha aumentado del 10 al 16% dentro de la UE12.
– Las mayores aportaciones españolas al sector son
olivar; y frutales y cítricos.
– La viticultura constituye la más baja aportación, es
decir, existe un alto grado de desespecialización.
– Los ovinos y caprinos doblan su peso entre 1987 y
2007, pasando a constituir uno de los pilares de la
agricultura española.
51
(2.2) Sector Agrario.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
52
(2.2) Sector Agrario.
• La productividad aparente del factor trabajo puede
desagregarse en dos componentes:
• Donde:
•La producción entre el empleo es la
productividad aparente del factor trabajo.
• La producción entre la tierra es el VAB real
(productividad de la tierra).
•La tierra entre el empleo es la superficie agraria
disponible por persona ocupada.
53
(2.2) Sector Agrario.
• Puede observarse en el Cuadro 5, que el valor añadido por
hectárea de superficie agraria (productividad de la tierra;
VAB/SAU) ha aumentado entre 1985 y 2010.
– Esto es debido a mejores técnicas químicas-biológicas
incorporadas a determinados inputs intermedios (fertilizantes,
semillas selectas, piensos, tratamientos sanitarios, etc.).
• El aumento experimentado en la superficie agraria disponible
(SAU/Empleo) por persona ocupada:
– se debe a las técnicas mecánicas que permiten la sustitución de
trabajo por capital (tractores, cosechadoras, etc.).
• La productividad del trabajo (VAB/Empleo) ha aumentado
notablemente en este período,
– fundamentalmente por el aumento de la superficie agraria
disponible.
54
(2.2) Sector Agrario.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
55
(2.2) Sector Agrario.
• La Política Agraria Común (PAC) nace casi al
mismo tiempo que la UE con una serie de
objetivos:
– Incrementar la productividad.
– Garantizar a los agricultores un nivel de vida
equiparable al de otros agentes económicos.
– Estabilizar los mercados.
– Asegurar el aprovisionamiento alimenticio a la
población a precios racionales.
• Tres principios orientaron la PAC:
– Unidad de Mercado.
– Preferencia Comunitaria.
– Solidaridad Financiera
56
(2.2) Sector Agrario.
• El efecto más visible de la PAC: el fuerte incremento
de la producción agraria (excedentes estructurales
en cereales, azúcar, carne de vacuno, leche y
productos lácteos).
• Reducción de los precios agrarios y redefinición de
las ayudas (pagos compensatorios por hectárea o
cabeza de ganado).
• Política de desarrollo rural: turismo rural, artesanía,
transformación alimenticia para enriquecer el tejido
productivo.
57
(2.2) Sector Agrario.
• Efectos de la PAC en España:
– La agricultura española ha aprovechado las
oportunidades del mercado interior europeo.
– Los recursos públicos hacia el sector agrario; las
subvenciones corrientes del FEOGA por unidad de
producto; son similares a los del resto de la Unión
Europea.
– España ha sido el Estado miembro más beneficiado
por la política de desarrollo rural hasta 2006;
perdiendo ese puesto a favor de Polonia.
58
(2.3) Sector industrial y
energético.
59
(2.3) Sector industrial y energético.
• Con frecuencia suele relacionarse industrialización con
crecimiento económico. Esto es debido al papel crucial
que el sector industrial ha tenido en las dos últimas
décadas sobre el crecimiento.
• La productividad del trabajo en la industria es mayor que
en la agricultura atrasada o en los servicios
tradicionales.
• Los sectores primario y terciario dependen del sector
industrial, fuente continua de progreso técnico.
• El crecimiento económico español de la segunda mitad
del siglo XX dependió fundamentalmente del
afianzamiento de la industria.
60
(2.3) Sector industrial y energético.
• El objeto de las actividades industriales es la
transformación de los recursos naturales.
• Este tipo de actividades puede clasificarse de dos
formas: atendiendo a la demanda o a la oferta.
• Si consideramos la demanda y, por ello, el dinamismo
de los mercados, debe utilizarse la elasticidad-renta de
la demanda. Puede distinguirse, de acuerdo con la
Comisión Europea, entre actividades de:
– Demanda fuerte: aeroespacial, electrónica, ordenadores,
instrumentos de precisión, productos farmacéuticos, ...
– Demanda media: química, gaucho, plásticos, maquinaria,
material de transporte, …
– Demanda débil: textil, calzado, siderurgia, construcción naval,
cerámica, madera, …
61
(2.3) Sector industrial y energético.
• Por otra parte, las actividades industriales pueden
clasificarse de acuerdo a la oferta.
– Para ello, se requiere conocer su eficiencia productiva, es decir,
el esfuerzo tecnológico destinado a la obtención de nuevos y
diferentes productos así como procesos productivos más
eficientes.
• Puede diferenciarse entre actividades de:
– Intensidad tecnológica alta.
– Intensidad tecnológica media.
– Intensidad tecnológica baja.
• En el Cuadro 1 se muestra una caracterización de las
manufacturas españolas para el año 2009, de acuerdo a
una clasificación mixta, que distingue entre actividades
de demanda y contenido tecnológico altos; medios y
bajos.
62
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
63
(2.3) Sector industrial y energético.
• De acuerdo al Cuadro 1, el contraste entre las
manufacturas avanzadas e intermedias y las
tradicionales es muy pronunciado.
• Las avanzadas e intermedias se enfrentan a un mercado
más dinámico, utilizan menos trabajo por unidad de
producto y se desarrollan en establecimientos de
dimensión media superior.
• Esto contribuye a una mayor concentración de la oferta
en las empresas líderes.
64
(2.3) Sector industrial y energético.
• En el Cuadro 2 se muestra la importancia de las
manufacturas en la economía española.
• La comparación del crecimiento de la industria con el
crecimiento del conjunto de la economía española se ha
reducido considerablemente desde 1985.
• Por ello, la industria ya no desempeña el papel central
en el desarrollo económico que tuvo durante la década
de 1960 y 1970.
• Esto se debe a la sustitución de una proporción de la
demanda interna por importaciones, como resultado del
entorno competitivo y la intensificación de la
competencia.
65
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
66
(2.3) Sector industrial y energético.
• Por su parte, el Gráfico 1 ilustra el peso de las
manufacturas en el VAB total para un conjunto de
países.
• La anteriormente comentada pérdida de peso de las
actividades industriales en el conjunto de la economía
española, ha generado cierta preocupación sobre una
posible desindustrialización de nuestra economía.
• Pero no puede concluirse que haya desindustrialización,
ya que la pérdida de peso se debe a la mayor eficiencia
de la industria en relación a los demás sectores de
actividad, lo que provoca una mayor productividad del
trabajo y un menor aumento de los precios.
• Además, es destacable la progresiva externalización de
servicios por parte de las empresas industriales,
especialmente los relacionados con las TICs.
67
67
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
68
(2.3) Sector industrial y energético.
• La desindustrialización que ha sufrido nuestro país es
relativa, debido a que el crecimiento de la industria es
elevado, aunque inferior al conjunto de la economía.
• En el Gráfico 2 puede observarse que el sector industrial
sigue un perfil parecido al conjunto de la economía, de
acuerdo al comportamiento de las tasas anuales de
variación del VAB las manufacturas españolas y el PIB
total.
• Es destacable la caída experimentado a partir de 2008.
Nuestra industria avanza con mayor rapidez en las fases
expansivas y retrocede más en las depresivas.
69
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
70
(2.3) Sector industrial y energético.
• El VAB de los tres grupos de manufacturas españolas
no ha alcanzado el mismo crecimiento en los últimos
años. La evolución de la estructura del VAB de las
manufacturas entre 1986 y 2009 se representa en el
Cuadro 4.
– A la vista de los datos, las manufacturas tradicionales
conservan su predominio, aunque han reducido algo su
participación en el VAB.
– Las manufacturas intermedias han aumentado su peso
relativo en el conjunto del VAB.
– Por su parte, las manufacturas avanzadas incrementaron
su importancia relativa hasta 1995, para retroceder
después. Este hecho diferencia a España del conjunto de
la Unión Europea de los 27.
71
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
72
(2.3) Sector industrial y energético.
• En el Gráfico 3 se ilustra la participación de las
manufacturas avanzadas en el valor añadido industrial.
• Si bien hasta finales del siglo pasado la estructura
interindustrial española tendía a crecer con la media
europea, en los últimos años parece divergir, dado el
retroceso de la participación en industrias avanzadas.
• Países como Finlandia, Corea, Hungría, Irlanda, Japón o
Alemania están a la cabeza en materia de manufacturas
avanzadas; situándose España junto a países com
Portugal, Polonia, Bélgica, Holanda o Grecia.
• La especialización manufacturera española no es la más
idónea desde el punto de vista del crecimiento y del
desequilibrio exterior de la economía.
73
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
74
(2.3) Sector industrial y energético.
• En materia de comercio internacional de manufacturas,
podemos destacar que las actividades tradicionales e
intermedias presentan problemas para conseguir niveles
de equilibrio o superávit externo.
• Además, existe un escaso nivel de cobertura de las
ventas exteriores de las industrias avanzadas, para las
que la relación producción-consumo aparente es baja
dado el nivel de desarrollo de nuestro país.
• Estos hecho se reflejan en el Cuadro 5, sobre Estructura
y cobertura comercial de las exportaciones de
manufacturas españolas 1985-2010.
75
(2.3) Sector industrial y energético.
76
(2.3) Sector industrial y energético.
• En la siguiente diapositiva se muestra el Gráfico 4, que
relaciona las tasas anuales de variación del VAB y la
productividad en las manufacturas españolas para el
período 1986 a 2010.
• Puede observarse que el crecimiento de la producción
industrial ha estado sustentado por el incremento en la
productividad del trabajo.
• Ha habido un importante aumento en el rendimiento
medio por trabajador, aunque desde 2008 ya no existe
esa correlación positiva entre el crecimiento del PIB y la
productividad.
• Esto se debe a la destrucción de puestos de trabajo
ocasionada por el escenario de crisis actual.
77
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
78
(2.3) Sector industrial y energético.
• Para finalizar este epígrafe se describirá la situación
del sector energético español.
• Tradicionalmente incluido dentro de las actividades
industriales, este sector presenta algunas
particularidades:
– Está estrechamente relacionado con la industrialización,
ya que ésta depende de los inputs energéticos no
renovables.
– Tiene un marcado carácter estratégico, como sector con
gran efecto de arrastre sobre otras ramas del aparato
productivo.
– Marcada tendencia a operar bajo mercados no
competitivos, por lo que ha sido objeto de una fuerte
regulación estatal en muchos países.
79
(2.3) Sector industrial y energético.
• En torno al sector energético se engloban una serie
de ramas productivas:
– Actividades puramente extractivas o mineras: carbón, …
– Transformación industrial de esos recursos: Refinerías,
regasificación, centrales que convierten energía primaria en
electricidad, …
– Actividades de servicios: Medios de transporte, distribución de
materias primas o los productos finales, …
• Por ello, suele diferenciarse “por combustibles”:
carbón, petróleo, gas natural, nuclear, renovables,
…
• El Gráfico 1 representa gráficamente la evolución
por fuentes primarias del sector energético en
España en el período 1975 a 2010, teniendo en
cuenta la anterior clasificación.
80
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
81
(2.3) Sector industrial y energético.
• El Gráfico 1 ilustra los ratios de intensidad energética,
comenzando en plena crisis del petróleo y finalizando en
2010. Es destacable:
– El gran aumento del consumo que se ha producido en dicho
período.
– La desproporcionada concentración inicial en el petróleo y el
paulatino mayor equilibrio entre las diferentes fuentes de
energía.
• Por su parte, el Gráfico contiene el ratio de intensidad
energética en España y Europa entre 1975 y 2009.
• La intensidad energética mide la cantidad de recursos
energéticos destinados a la obtención de un
determinado producto. Cabe destacar:
– En el promedio de países europeos, la intensidad en el uso de la
energía primaria ha ido disminuyendo.
– En cambio, en España, dicho ratio ha ido creciendo hasta
82
alcanzar los ratios continentales.
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
83
(2.3) Sector industrial y energético.
• La importancia del sector energético en el conjunto de la
economía española se reduce a únicamente el 3% del
PIB de nuestra economía en el año 2010.
• Por otra parte, destaca nuestra gran dependencia del
exterior en materia energética; el 18,5% de las
importaciones totales en el año 2010 constituyeron
energía.
• Estos hechos se muestran en el Cuadro 1.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
84
(2.3) Sector industrial y energético.
• Si efectuamos un análisis del balance energético
español por fuentes primarias, como el del Cuadro 2,
para el año 2010, puede concluirse que:
– España es autóctona en energía nuclear y renovable, puesto
que autoabastece el consumo con la producción.
– Es destacable el aumento de las energías renovables en los
últimos años; pudiendo cubrir el 44% de la demanda eléctrica en
2010.
– Pero existe una fuerte dependencia del petróleo del gas natural
y del carbón como fuentes primarias de energía.
• El grado de autobastecimiento energético de un país
depende de:
– Factores estructurales como la dotación de recursos autóctonos,
escasos en España.
– La propia composición del consumo energético; que también
puede ser una decisión política.
85
(2.3) Sector industrial y energético.
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
86
(2.3) Sector industrial y energético.
• La política energética española está englobada en la línea
que marca la Unión Europea.
• Se ha seguido una política de liberalización para dejar el
sector energético en manos del sector privado.
• La minería del carbón afronta una progresiva reducción; con
el actual Plan de la Minería del Carbón 2006-2012, se prevé
que el sector haya reducido su empleo hasta los 5.300
trabajadores.
• La Ley de Hidrocarburos de 1998 liberalizó la
comercialización de productos petrolíferos y el suministro de
gases licuados de petróleo, además de liberalizar el
subsector del gas natural.
• La Ley del sector eléctrico de 1997 promovió la libertad de
establecimiento (oferta) y de elección (demanda).
• Con estas medidas, el mercado energético se ha vuelto
eminentemente competitivo.
87
(2.3) Sector industrial y energético.
• La planificación de los sectores de electricidad y gas
(2008-2016) contiene indicaciones para las actividades
liberalizadores de estos dos sectores.
• El gas natural y las energías renovables constituyen las
apuestas de la política energética española, de acuerdo
con los objetivos de diversificación, ahorro, garantía de
suministro, eficiencia energética y protección ambiental
derivados de las directrices europeas.
• El Plan 2005-2010 fijó el objetivo de la duplicación del
peso de las energías renovables.
• El Plan 2011-2020 recoge el objetivo de que las
energías renovables alcancen un peso del 20% dentro
del balance energético. Debido a ello, las energías solar
y fotovoltáica han alcanzado un gran desarrollo en
aportación a la energía eléctrica.
88
(2.4) Construcción y
Sector Servicios
89
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• La construcción es la actividad industrial que provee
edificios e infraestructuras a una economía.
• Contribuye a la modernización de los entornos
productivos, al equipamiento de los centros urbanos y a
mejorar la calidad de vida de la sociedad.
• Además, es un sector clave en el crecimiento económico
debido a los importantes efectos de arrastre que genera
sobre el resto de actividades.
• Suele diferenciarse entre:
– Edificación: Estructuras cerradas con dotación propia de
recursos.
– Obra civil: Realización de infraestructuras.
• Por otra parte, en los mercados inmobiliarios
intermedian bienes o servicios de edificaciones o
instalaciones de uso privado; no existiendo un mercado
90
para las infraestructuras.
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• El Cuadro 1 contiene datos para evaluar la evolución y
la relevancia de la construcción en la economía
española entre los años 1985 y 2010.
• La construcción aporta al valor añadido real de la
economía entre un 7 y un 10% en términos reales. Entre
2006 y 2009 su contribución superó el 9%.
• Su aportación a la formación bruta de capital supera en
media el 55% del total de la economía española.
• También es una actividad generadora de empleo, ya
que las población ocupada en la construcción supera el
10% del total de las personas ocupadas.
91
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
92
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• El Gráfico 1 muestra la evolución de la construcción y
del PIB en España entre 1965 y 2010, mediante sus
tasas de variación.
• Es destacable el hecho de que la construcción crece y
decrece más rápido de lo que lo hace la economía.
– En las fases expansivas, aumenta más el VAB de la
construcción.
– En lasa fases recesivas, disminuye más el VAB de la
construcción.
• Puede observarse el fuerte crecimiento del sector desde
la entrada en la UE en 1986, hasta la recesión sufrida
desde 2006.
93
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
94
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• En el Cuadro 2 se presentan datos sobre el stock de
viviendas y la intensidad de la edificación en España
entre 1962 y 2010.
• Puede verse el paulatino aumento del stock de
viviendas, con 9,9 millones en 1962 y 25,5 millones al
finalizar 2010.
• Entre 1962 y 1978 el aumento de la población y el
elevado crecimiento económico hacen que aumente la
demanda de viviendas.
• Entre 1979 y 1993 ha habido una crisis en el sector
como resultado del estancamiento de la economía
(desempleo creciente, elevados tipos de interés y
dificultades financieras).
95
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Es destacable el fuerte incremento en el número de
viviendas construidas entre 1994 y 2007; alcanzado en
el trienio 2005-2007 un total de 665 mil. Esto es debido
a las transformaciones de nuestra economía derivadas
de la creación del Mercado Único Europeo.
– Nuevas fuentes de demanda motivadas por los flujos de
inmigrantes.
– Aumento de los flujos de financiación para la vivienda:
liberalización del mercado de capitales, mayor liquidez
internacional, bajos tipos de interés, …)
– Mayor transparencia en el mercado.
• A mediados de 2008 estalló una crisis financiera
internacional que redujo la liquidez mundial y el crédito.
La ausencia de crédito repercutió inmediatamente sobre
las compra-venta de viviendas. Este hecho no ha
ocurrido únicamente en España.
96
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
97
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Existen numerosas políticas públicas que afectan a
la construcción, como la política de viviendas, la
política del suelo y las leyes urbanísticas.
• Existen planes de vivienda para implementar el
derecho a una vivienda digna recogido en nuestra
Carta Magna.
– Se ha fomentado la construcción, mediante un
conjunto de medidas de estímulo de la oferta.
– Se ha fomentado el acceso de las familias,
instrumentalizando medidas sobre la demanda.
98
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Estas políticas han tenido como consecuencia un
fuerte aumento de la construcción de viviendas
libres, especialmente desde comienzo de los años
1990 hasta 2006.
• Por otro lado, se ha reducido la construcción de
viviendas de protección oficial, reduciendo su
protagonismo desde los momentos de mayor
necesidad.
• Estos hecho pueden verse en el Gráfico 3 que
ilustra la evolución de la construcción de viviendas
libres y protegidas en España entre 1975 y 2010.
99
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
100
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Finalizaremos este capítulo dedicado a las
actividades productivas de la economía española
analizando el Sector Servicios.
• Los servicios son la actividad productiva con mayor
peso en las economía desarrolladas; representan
un porcentaje en torno al 70% de la producción y el
empleo.
• Este sector incluye actividades heterogéneas, como
transportes, telecomunicaciones, comercio,
hostelería, sanidad, educación, servicios
financieros, servicios a empresas y los servicios de
las Administraciones Públicas.
101
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Puede diferenciarse entre:
– Servicios de mercado y servicios no destinados a la
venta: En función de si son suministrados por el
mercado o por el sector público (gratuitamente o a un
precio no relacionado con los costes de producción).
– Servicios intermedios y servicios finales: Si son
consumos intermedios o se destinan al consumo
final.
– Servicios estancados y servicios progresivos: Los
estancados presentan dificultades para reducir su
cantidad de mano de obra sin que la calidad o la
producción se vea afectada. Por otra parte, los
progresivos pueden aumentar su productividad
mediante el uso de capitalización o TICs.
102
(2.3) Construcción y Sector Servicios
• En el Cuadro 1 se muestra la evolución de los
principales indicadores del sector servicios en
España entre 1985 y 2010.
• Puede observarse la gran expansión de la
participación de los servicios en la producción
nacional, siguiendo la tendencia de los países
desarrollados.
• Por otra parte, es destacable el gran aumento
de la proporción de personas empleadas en
servicios, pasando de un 55,8% en 1985 a un
73,9% en 2010.
103
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
• Estas incremento sobre la participación en el
total del PIB y del empleo, puede representarse
gráficamente, como se ilustra en el Gráfico 1.
104
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
105
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Seguidamente se realizará un análisis de la
especialización de la producción española de servicio
mediante los datos del Cuadro 2.
• Las actividades más relevantes en la producción de
servicios son las inmobiliarias y servicios empresariales,
con un porcentaje del 25,4% en la producción de
servicios en 2009.
• Las actividades de comercio y reparación representan
un 15,4% de la producción de servicios en nuestro país.
• Por su parte, la participación de la hostelería es superior
al 10%, reflejo de la importancia del turismo en nuestro
país.
• El transporte y los servicios de las Administraciones
Públicas también tienen un peso importante,
respectivamente, el 9,6% y el 9%.
106
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
107
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Si se revisan datos sobre el comercio español de
servicios, como los que aparecen en el Cuadro 3:
– El turismo y los viajes participan en un gran porcentaje en las
exportaciones de servicios y tienen la mayor tasa de cobertura;
fruto de la alta competitividad de las empresas turísticas
españolas.
– Es destacable la creciente presencia de las empresas españolas
de servicios informáticos en los mercados internacionales, dado
que la tasa de cobertura de los servicios informáticos también es
elevada.
– Con excepción de los servicios financieros, el resto de
actividades terciarias resultan deficitarias en materia de
comercio internacional.
• En comparativa con otros países (ver Gráfico 2), nuestro
país presenta unas bajas cuotas de exportación, a pesar
de haber aumentado en el período 1985 a 2009.
108
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
109
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
110
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Merece especial interés el turismo en España, ya que
representa cifras en torno al 12% de la producción y al
10% del empleo de los servicios. Aproximadamente la
mitad corresponde a turismo extranjero.
• España es uno de los principales destinos turísticos del
mundo, como puede verse en el Recuadro 2. Nuestro
país fue en 2008 el tercer destino turístico con mayor
número de visitantes, alrededor de 57 millones;
ocupando Francia y Estados Unidos los dos primeros
lugares del ranking.
• Los ingresos por turismo ascendieron a 61 mil millones
de euros en 2008.
• Esto es debido a la situación geográfica y a la dotación
de recursos naturales que posee nuestro país.
111
(2.4) Construcción y Sector Servicios
RECUADRO 2:
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
112
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• El Cuadro 4 contiene datos sobre la producción,
empleo y la productividad de los servicios en
España y la UE27 en el período 2000-2009.
• Puede observarse que ha habido un débil avance
de la productividad en los servicios, salvo en la
intermediación financiera y los servicios de la
Administración Pública.
• La aportación de productividad al crecimiento de la
producción española de servicios en dicho período
ha sido inferior a la registrada en la UE27.
113
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• Existen tres factores que explican la baja
productividad de nuestros servicios:
– La especialización en actividades con baja intensidad
en capital físico y humano y con gran cantidad de
mano de obra no cualificada.
– El bajo nivel de competencia que ha existido
tradicionalmente en nuestros servicios.
– El reducido tamaño de las empresas de servicios,
especialmente las dedicadas a la distribución
comercial y hostelería.
114
(2.4) Construcción y Sector Servicios
FUENTE: García Delgado, J.L y Myro, R. (2011): Lecciones de economía
española. 10ª Edición, Madrid. Thomson-Cívitas.
115
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• El sector servicios español ha sido objeto de fuertes
regulaciones por parte de la Administración Pública con
el objeto de corregir los denominados fallos de mercado
(rendimientos crecientes, externalidades, información
imperfecta, …).
• Durante los años 1990, se inició un proceso de
liberalización del sector para superar las ineficiencias
creadas por dicha regulación.
• Se han ido privatizando las empresas públicas con el fin
de someterlas a las fuerzas del mercado y seguir una
política de defensa de la competencia.
• De esta forma, se pretende que la competencia
favorezca la eficiencia, productividad y el desarrollo
económico.
116
(2.4) Construcción y Sector Servicios
• En la gran mayoría de los casos, la
desregulación de los mercados de
servicios ha producido los resultados
esperados:
– Aumento de la productividad y eficiencia
empresarial.
– Reducción de los precios de los servicios.
– Mayor calidad de los servicios.
– Redistribución de renta hacia los
consumidores.
117
(2.5) Conclusiones
• En este segundo capítulo se ha realizado un análisis de
la situación actual y de la evolución en las últimas
décadas de los sectores productivos de la economía
española.
• Nuestra economía ha pasado de ser la propia de un país
eminentemente agrario durante los años 1960 a una
economía desarrollada basada en el sector servicios en
la actualidad (como se muestra en el Gráfico 3).
• Por su parte, el sector industrial se ha mantenido a lo
largo de este medio siglo como el segundo sector
productivo en el peso de la economía española. Ha
habido un relativo proceso de desindustrialización,
debido a que el crecimiento de la industria es elevado,
pese a ser inferior al del conjunto de la economía
118
(2.5) Conclusiones
• El sector energético tiene un reducido peso, 3%
del PIB en el año 2010, en el conjunto de la
economía española; mostrando, además, una
gran dependencia del exterior en materia
energética (el 18,5% de las importaciones
totales en el año 2010).
• También se ha destacado la importancia de la
construcción en España, debido al aumento en
la construcción de viviendas motivado por
diversas políticas públicas.
119
(2.4) Conclusiones
GRÁFICO 3:
FUENTE: http://www.evocacion.es/files/html/1431751/recursos/la/U11/pages/recursos/1431
75_P149/es_carcasa.html
120